Por fin encontraste a una persona especial en tu vida y ya llevas un tiempo de excelente relación. Por supuesto, hay altos y bajos, pero en general ¡eres feliz y te sientes plena junto a la persona que amas! Y deseas estar siempre así, junto a él, comenzando a proyectar un largo camino. Pero, ¿están en la misma sintonía? Aquí te dejamos algunos signos clarísimos de que ¡sí, van bien encaminados! y puedes haber encontrado al hombre de tu vida:
1) Te proyectas. Y a él le pasa lo mismo. Visualizan juntos el futuro y se sienten motivados para afrontarlo tomados de la mano.
2) Conoces su lado oscuro. Y aún con eso, ¡lo amas, te fascina y se entienden! Sabes qué aspectos de su personalidad te molestan, qué hacer para sobrellevar los conflictos que nazcan a partir de ello y estás dispuesta a transar en los puntos en que es posible hacerlo. Y a él le pasa lo mismo contigo: te ha visto en modo bruja y aún así, camina contigo.
3) Se comunican bien. Son capaces de expresar claramente qué les disgusta del otro. No rehuyen las discusiones, porque saben que de ellas pueden aflorar puntos que mejoren la relación; pero tampoco se quedan entrampados en ellas: miran hacia adelante y procuran resolver cada problema que se les presente. Asimismo, pueden compartir sus sueños y visiones, aún cuando sean diferentes.
4) ¡Ya no tienes ganas de separarte de él cuando te lleva a tu casa! Te gustaría despertar cada día a su lado. Y eso a él también le ocurre.
5) La relación va más allá del aspecto físico. Él te seduce también en lo emocional. Tus encuentros con él no se limitan a la intimidad sexual; además puedes compartir sus silencios sin que te resulten incómodos. Oyes lo que le ocurre y te interesa su bienestar, estar con él y apoyarlo en todos sus momentos, sean estos buenos o malos.
6) Confías en él. Puede juntarse con amigos en un pub y sabrás que no andará en malos pasos movido por ellos, simplemente porque no está en su esencia. Lo mismo al revés: él confía en ti. Y no te hará escenas si te juntas con tus amigas para ir a un concierto, porque sabe que lo amas y respetas aún cuando no esté presente.
7) Ambos se aceptan y se aman tal cual son. Ninguno pretende imponer cambios en el otro. Los dos sabrán negociar las decisiones que les afecten, sin que ninguno se empecine en que prevalezcan sus opciones (y por supuesto, el resultado no afectará la salud de la relación)
8.) Nunca hará planes que no esté dispuesto a respaldar en el futuro. Si te dice algo, es porque así lo siente, realmente quiere que se concrete y ha pensado en las formas de hacerlo realidad. No envía señales confusas; dice lo que piensa y piensa lo que dice, actuando en consecuencia.
9) Llevas junto a él un tiempo razonable; el suficiente para conocerlo y darte cuenta si concurren todos los puntos antes referidos. No olvides que el principio de una relación siempre es de ensueño y juzgar el futuro desde ese punto podría resultar precipitado.
10) Sientes que tu hogar - no físico, del alma; ese calor rico que percibes en tu corazón cuando eres acogida y amada, donde puedes descansar y ser tú misma - está exactamente en el lugar donde se encuentra esa persona. Que es tu familia y ocupa un lugar importantísimo en todos tus proyectos.
Si después de leer estas señales, confirmas que definitivamente ¡lo encontraste!, entonces ¡felicidades! Sólo resta pedirte que lo cuides, manteniendo la intensidad del sentimiento. Y si no, ¡disfruta mientras las bondades de la soltería! Mira que - el día menos pensado - el amor llegará para quedarse ¡y no podrás resistirte a sus encantos!