Puede ser por mi signo Virgo, por ser enferma de fijona, o simplemente un poco loca (quizás un mix de todas), pero siempre ando fijándome en muchos detalles de la vida diaria. Por ejemplo, en que el color de los aros que me pongo combine con lo que llevo puesto, o al menos con el tono que predomine.
También me preocupo de ordenar siempre de la misma forma las cosas en la cartera (los documentos en un lugar, las cosas de aseo en otro, la agenda/cuadernos en el compartimento correspondiente, etc). Y de lavar la loza en determinado orden: los platos y cosas grandes primero, luego los platos hondos, después los pequeños, siguiendo con los vasos, el servicio y las cosas pequeñas.
Estas últimas "manías" se relacionan más bien con un tema de orden, pero hay otras que a veces siento que rayan en la locura: en mi casa hay perros y gatos, por lo que es normal que la ropa de las personas que aquí viven quede con pelos. Y al respecto, puedo contarles que soy capaz de estar todo el día sacando pelito por pelito de la ropa negra o aquella en que más se notan.
En cuanto a las demás personas, también soy bastante observadora. De sus gestos, la postura de manos y cuerpos, cómo hablan, y por supuesto, qué hablan. Hay temas de los cuales me interesa mucho notar cómo se expresan las personas que me rodean.
Como verán, siempre me fijo en detalles en que nadie más repararía. Incluso, a veces siento que me fijo más de la cuenta, ya que mi mente no para de analizar en todo segundo.
Y tú, ¿crees importante fijarse en los detalles?
Foto CC Vía Julian Partridge