Siempre me gustó el estilo “gipsy”. Es más, cuando aparecen los primeros rayos del Sol, suelo transformarme en una verdadera gitana, sacando de mi closet bellísimas y largas faldas con hilos dorados, encajes y telas brillantes. Tienen en común el ser vaporosas y con harto ruedo.
Se acerca la primavera y el “gipsy” no estará ausente de mi armario ni el de tantas que como yo ¡aman! esta sempiterna tendencia. Así es, porque las modas pasan, pero siempre nos veremos bien con este fresco y delicado estilo, que da a nuestro outfit un toque natural y “hippie”, pero con glamour.
Además de esas larguísimas faldas (las hay en patchwork, con hilos brillantes, aplicaciones de encaje, raso o lentejuelas y telas como el plush o el terciopelo), este estilo incluye tops con pabilos, confeccionados tanto en género como a crochet. El “gipsy” se adapta a cada ocasión, ya que puede darte un aire relajado e informal en una reunión de amigas o hacerte lucir sexy y distinguida en una cena formal. Esto, si lo acompañas con los accesorios adecuados, como unos lindos stilettos y un clutch.
De más está decir que, como buen “gipsy”, siempre debe acompañarse con aros largos, vistosos y agitanados. Ciertamente, un outfit ¡de princesa!
Y tú, ¿te atreves con el “gipsy”?
Imagen CC FashionGeeksta