La prensa inglesa hoy confirmó la muerte del increíble diseñador Alexander MacQueen, que a sus cuarenta años ya se había convertido en uno de los íconos de la moda mundial. Dueño de una brillante creatividad, fue nombrado sucesor de John Galiano en Givenchy y más tarde trabajaría con Gucci.
MacQueen se habría suicidado, al parecer por una fuerte depresión tras la muerte de su madre, hace 10 días.
El diseñador, vistió con su marca a grandes estrellas como Björk, la Duquesa de Westminster e Isabella Blow, con prendas impregnadas de una sensibilidad un poco gótica, no obstante, siempre acentuando la femeneidad.