Yo sé que me voy a convertir en una mamá trabajólica… si llego a tener hijos. ¡Obvio! Criar a un niño es súper caro y queremos darle lo mejor de lo mejor.
Esto se suma a la búsqueda del desarrollo personal y del éxito profesional que cada día nos interesa más a las mujeres.
Cómo no voy a ser trabajólica si estamos en un mundo súper competitivo. Además, si quiero ser un buen ejemplo para mis niños tendré que ser una fan del esfuerzo, del café y de las pocas horas de sueño.
Lástima para los pequeños que cada día son más cuidados por abuelos y nanas, pero es la realidad de la mujer chilena, que con suerte tiene el post natal y las vacaciones para compartir con sus hijos… porque la mayoría de los trabajos son a jornada completa y si tienes uno a medio tiempo no ganas suficiente y tienes que buscarte otro.
¿La sociedad nos obliga a ser trabajólicas? No puedo ser tan tajante y decir que tooooda la culpa la tiene el sistema… pero convengamos en que no nos ayuda mucho.
Espero tener esa gran capacidad de poder lidiar con mis expectativas profesionales, con el éxito y con la buena madre que quiero ser. ¡Claro que se puede! Admiro a esas mujeres que lo han logrado.
¿Y tú eres una trabajólica?