El otro día tenía muchas ganas de comprarme unas lindas botas que había visto en una vitrina en el Alto Las Condes. Eran tan bellas, estilosas y originales...pero así y todo, ese día no contaba con mucho tiempo como para probármelas. Tenía tantas cosas que hacer en la oficina, que finalmente lo dejé para otra ocasión.
A los dos días después, fui por ellas y lamentablemente, la vendedora ya estaba quitando la mayoría de las botas y cambiándolas por los zapatos de la próxima temporada!! Incomprensible, porque eran los primeros días de julio, época donde hace más frío y por ende, más se necesitan.
Los avances de temporada es una práctica que se lleva a cabo hace muchos años en nuestro país, por las tiendas de retail. “Traer la última moda, por lo general “copiada” de Europa, tiene sólo una razón: competir y a la vez, apaciguar a clientes que cada vez son más “ansiolíticos” por las últimas tendencias”, explica la diseñadora de vestuario, Patricia Fuentealba a Fucsia.
No obstante, esta constante competencia entre marcas, creo que no nos beneficia en nada a nosotras, las consumidoras. Claro, podemos estar al tanto de la última moda en otros países, pero creo que debe haber un equilibrio con las actuales necesidades de la temporada. Y tú ¿qué opinas?