Ahora salió un estudio que lo comprueba, pero es algo que siempre hemos sospechado; las películas románticas pueden llegar a dañar las relaciones de pareja. Tal como Rob, el protagonista del libro y la película Alta Fidelidad se preguntaba, muchos nos hemos cuestionado alguna vez si la idealización que viene del arte (las películas, libros y canciones que nos influyen) termina dañando nuestras expectativas de lo que es una relación de pareja realmente. "¿Somos infelices por qué escuchamos música pop o escuchamos música pop porque somos infelices?"
El estudio asegura que después de ver películas románticas, las parejas que asistieron a las funciones, tuvieron problemas de comunicación que tenían que ver con las expectativas falsas que crean ese tipo de cintas y eso también se puede trasladar a otras cosas, como libros o música. El hombre está obligado a luchar hasta el final por el amor de la mujer, una vez que se conocen y se reconocen como almas gemelas, están virtualmente obligados a estar juntos y no hay nadie que pueda separarlos. Sólo existe una persona destinada a ser "el amor de tu vida" y si peleas con tu pololo siempre vendrá una reconciliación que incluirá fuegos artificiales y mentiras asociadas como que uno nunca se aburre con el otro, ni piensa en otras personas mientras está en pareja.
La versión del amor que nos presentan las películas y las canciones, en mayor medida está destinado a vender una ilusión perfecta de lo que realmente es; son pocas las que nos muestran lo que pasa con una pareja de verdad. Son entretenidas, son bonitas, pero no se ajustan a lo que pasa en la mayoría de nuestras experiencias, donde las relaciones, aunque no queramos, se complican y necesitan mucho más trabajo del que le toma a Sandra Bullock en cualquiera de sus películas románticas.