Cada vez que veo a Jason Priestley pienso inevitablemente en Brandon Walsh, el hermano mellizo de Brenda en Beverly Hills 90210. Aunque ya pasaron como 20 años, su cara quedó estampada en posters adolescentes y en la memoria de toda una generación.
Luego de mucho tiempo intentado deshacerse del fantasma de aquel personaje y conformándose con personajes secundarios o terciarios, Jason vuelve el gloria y majestad, no sólo como el protagonista –lugar en el que siempre debió estar- si no que además como productor y director. Anoche fue el estreno de su nueva serie “Call Me Fitz”, por Sony, y me gustó.
La serie se trata de un arrogante vendedor de autos, Richard Fitzpatrick, que cree sabérselas todas. Hasta que tiene un accidente y deja a una de sus clientas en coma. Después de esto, deberá aprender a vivir con su conciencia, literalmente, que intentará hacerlo cambiar a toda costa.
Además parece que los 40 y tantos le sientan bien, Jason está más mino, con un look más interesante y el papel de Don Juan atrevido y chistoso le queda perfecto. Al menos el primer capítulo me convenció. Les dejo el trailer después del salto.