Creo que a muchas les ha pasado, que el ser demasiado simpática o amable con el sexo opuesto, suele ser malinterpretado, a tal punto que ellos juran que tú estás locamente enamorada y sólo lo haces para poder conquistarlos.
No sé si son los hombres muy enrollados, o lo somos en forma similar, pero me ha pasado que por sociabilizar más de la cuenta, los individuos requetejuran que una tiene algún tipo de interés por ellos que va más allá de la amistad. Conozco un caso cercano, donde una amiga fue muy sociable con un chico. No obstante, uno de sus compañeros de trabajo le decía a Estefanía que tuviera cuidado porque el tipo era “enrollado”. Dicho y hecho! Al par de semanas, el chico envía un mail todo sugerente a mi amiga, suponiendo que ella tenía un alto interés en él.
Creo que situaciones como éstas pasan todos los días. Puede ser que “enamores” a esa persona con tu personalidad, pero lo terrible es cuando tú no sientes lo mismo; y tampoco lo venías venir.
¿Qué hacer en ese momento? Yo uso la peor técnica y es despecharlos inmediatamente. Sé que no es la mejor forma, pero es mi maldita forma de ser.
Y tú, ¿qué haces tú en esta situación?