Oficialmente se supone que es "un film sobre The Doors", pero cuando terminé de verlo, concluí dos cosas: primero, que en realidad es sólo acerca del guapísimo Jim Morrison, porque a la banda casi no la mencionan, y segundo que Jim Morrison era The Doors.
El "documental" puede resultar efectivamente "extraño", sobre todo en aquellas partes en las que un actor con un gran parecido a Jim, nos hace pensar que Morrison efectivamente fingió su muerte.
Las explicaciones sobran, porque siempre será mejor verlo. Yo me fasciné con el drogadicto de Jim Morrison, pero no por drogadicto, sino por lo engrupido que era. Era exactamente igual que todos aquellos hombres que se saben guapos y hacen uso de su beneficio... cuando lo vean, me entenderán.