Siempre me ha llamado la atención el cálculo de las calorías pero sobre todo esas personas que tienen la “habilidad” de indicarte, así de la nada, el valor calórico de cada una de las cosas que estás a punto de ingerir, como nuestra amiga Bradshaw, una seca en la materia.
Por eso, descubrir que existe una aplicación para el celular capaz de hacer esa ardua y compleja tarea, resulta una verdadera felicidad para muchas. Porque con sólo apuntar tu smartphone hacia lo que piensas ingerir, este identifica el alimento y automáticamente, después de una especie de scanner, calcula su peso y su coeficiente calórico.
Hay varias historias de personas que han logrado bajar de peso mágicamente con estas aplicaciones, como es el caso de Shelli Henderson, quien bajó 44 kilos en ocho meses de forma saludable, dado que la herramienta es capaz de controlar de forma eficiente las calorías. “Un día me bajé el contador de calorías casi por casualidad y lo probé una semana. Baje de pesó en pocos días y seguí usándolo hasta ahora”. Pero claro, no tenemos cómo saber si esta no es otra de esas mágicas e ilusas soluciones del tipo “llame ya” que no resultan en nada más que en una estafa.
Y como si esto fuera poco, la misma empresa creadora de esta increíble app, también lanzará al mercado un medidor de hambre, un aparato similar al alcoholímetro que a través del aliento, en vez de medir el alcohol, calcula la cantidad de acetona que tenemos en la sangre. Esto nos avisa -sentencia- si efectivamente necesitamos o no comer, ya que el cerebro humano es incapaz de entender si tenemos hambre.
Con esto, ya no habrán excusas para las hamburguesas y chocolates a altas horas de la madrugada.