Foto: Película "Loca por las Compras"
No es que sea compradora compulsiva ni mucho menos, pero cuando voy a mall, tengo que salir con algo de ahí, con una bolsa que sea, si no, siento que perdí el tiempo.
Y es que hay veces que te recorres todas las tiendas y no hay caso, nada te gusta, sientes que nada te queda bien y terminas por resignarte yéndote a tu casa triste y con las manos vacías.
Porque para qué vamos a venir con cosas, a la mayoría de las mujeres nos encanta pasearnos por todo el mall buscando la prenda perfecta o algo que esté en oferta.
Les aseguro que muchas veces intentan e intentan, buscan y buscan con tal de llevarse algo de las tiendas, pero todo es en vano porque no hay nada bonito que nos haga gracia como para comprarlo. Además, sería comprar por comprar y eso, al final es peor. En esa situación, es mejor guardar la plata y esperar un día con más suerte.
Aparte por caminar mucho rato por el mall, después llegas mil cansada a tu casa y no tienes ganas de hacer nada más.
¿Y a ustedes les ha pasado algo parecido?