Siempre me he preguntado qué pasa por la cabeza de un hombre cuando tiene la brillante idea de tirarte un piropo. ¿Creen que a una le sube el autoestima, que nos alegran el día? Hay piropos que van demasiado lejos -como cuando me dijeron "le llenaría el choro de moco"-. ¿Ese viejo verde suponía que me excitaban sus palabras? Ahora que ando en bicicleta, mágicamente me volví objeto del deseo de todo sujeto que pasa por mi lado. Ni siquiera me veo sexy con el casco y toda transpirada, lo que pasa es que la ecuación "mujer + bicicleta" resulta irresistible para ciertos orangutanes trogloditas. Déjenme decirles algo, cada vez que me tiran un churro me hierve la sangre. ¿Cómo hacerle entender a esos tarados que NO es agradable escuchar sus sandeces?
En fin. No soy la única con este sentimiento. A una chica argentina le pasa lo mismo. De eso se trata el video que les dejo ahora. TIENEN que verlo, a mí, como mujer que odia los piropos, me identificó mucho. PIROPOS from cualca! on Vimeo.