A pesar de que existen muchos artículos y dietas para bajar de peso en internet, están rodeadas de mitos. ¿Comer pan engorda?, ¿la fruta hace bien?, ¿comer sano es caro?. A veces, los buscadores no pueden responder a todas nuestras preguntas y no siempre dicen la verdad. ¿Creerle o no al computador?.
Si uno escribe “dieta” en Google, nos encontramos con miles de millones de resultados. Pautas de alimentación extremas, comer manzanas todo el día, examinar el genotipo; u otros secretos de belleza como la nuez de la india, píldoras peligrosas como la sibutramina, masajes e inyecciones.
Sin embargo, luego de pocos días disfrutando ese par de kilos menos, nos damos cuenta de lo peligrosas que pueden ser. Por ejemplo, hay pastillas que generan adicción, y dejar de ingerir algún tipo de alimento, como carbohidratos o proteínas, podría provocar distintos males en tu salud, como disminución de las defensas, anemia, cansancio, entre otras.
Ir al nutricionista es la mejor opción si no tienes idea de cómo comer saludable y para derribar mitos. Hay personas que creen que comiendo fruta todo el día bajarán de peso, pero no tienen idea que el exceso de fructosa es, al final, el exceso de un tipo de azúcar.
Tu alimentación también depende de tu cuerpo, ya que hay enfermedades donde ciertos alimentos podrían mejorar o empeorar tu salud. Si tienes hipertensión, por ejemplo, te disminuirán la cantidad de sodio. Si tuvieras el colesterol alto, te darán una dieta con poco porcentaje de grasa, o si sufres de resistencia a la insulina te prohibirán el azúcar y tendrás que controlar tu ingesta de carbohidratos y frutas. Por eso, antes de cualquier cambio en tu alimentación, el nutricionista te recomendará que te hagas un chequeo médico.
Hay otros casos donde la persona lleva años intentando hacer distintas dietas pero que nada resulta, con nutricionista incluída. Le sucedió a Deborah Guendelman que, luego de intentar cada fórmula y pastillas que encontró en el mercado, logró bajar de peso en grupo. Como el Weight Watchers de Estados Unidos, pero en Israel. Estudió nutrición y lo trajo a Chile.
Ella cree que el problema es a nivel mental, pero que el hecho de comprometerse con más personas, realmente, hace un cambio. “Yo nunca había sido flaca, y lo logré con el grupo. Es lo mejor, por eso existen agrupaciones para todo tipo de adicciones y problemas, drogas, alcohol, terapias de parejas; es lo único que realmente produce un cambio en la gente. El hecho de generar un compromiso con otra persona tiene mucha fuerza, porque sola yo no pude”.
Bajar de peso es muy simple. Al final, todo se resume a consumir menos calorías de la que tu cuerpo necesita, o bien, quemarlas haciendo ejercicio. Quizás tu problema con el peso sea hormonal y no tienes idea. Puede ser que seas ansiosa y uses la comida para esconder tus penas. O seas adicta al azúcar o a las grasas, y por eso las dietas flash te duran tan poco, porque apenas las dejas, subes de peso. Ignora esos comentarios que dicen “ser flaca es fácil, solo hay que cerrar la boca”. Si fuera así de simple, ¿habría un índice tan alto de obesidad en el mundo?. Si crees que eres una de ellas, busca ayuda y basta de poner tu cuerpo en peligro.