Siempre he pensado que las palabras son la puerta a las relaciones, que cuando eres consciente de ellas y de su uso puedes conseguir muchas cosas positivas. La forma en que las utilizas genera un cierto grado de impacto en la otra persona, que define el futuro de las interacciones que tendrán a lo largo del tiempo.
Cuando utilizas mal una palabra puedes llegar a herir muchas sensibilidades en una persona, por eso es importante respirar antes de lanzar lo que estás pensando, muchas veces puede que ni siquiera estés seguro de que son esas las palabras correctas sobre lo que sientes.
Es así como las palabras representan una llave que tiene la posibilidad de abrir tu mente y sensibilizarla ante las cosas que están sucediendo. No se trata de utilizar las letras para demostrar “pena” sino más bien usarlas para cautivar de una manera un tanto poética sobre una causa a las personas.
Cada inspiración que surge de una palabra es un peldaño, cuando comunicas un mensaje de una manera que “toque” a los receptores puedes llegar a tener el poder de dar un vuelco a una situación. ¿Alguna vez les ha pasado que ante algo sienten que pueden decir más? ¿O que les han dicho algo que los ha marcado de por vida? Es que el valor de las palabras está ligado con la mente, los estímulos, gracias a ellas a veces somos mejores personas.
Les dejo un vídeo que estoy segura les hará sentido. Ahí me cuentan que les pareció.