En mi búsqueda por disminuir las masas de la dieta encontré un deliciosa receta de lasaña que no requiere de harina. En este caso, vamos a sustituir las láminas de pasta por deliciosas láminas de berenjenas.
-Mito de la berenjena amarga:
Hay personas que no comen esta deliciosa verdura porque dicen que es amarga. La verdad es que hay varias formas de solucionarlo:
- Cortar láminas de berenjenas, agregarles sal por ambos lados y dejarlas reposar. Luego de una hora, lavarlas muy bien y cocinar.
- En una fuente con agua y sal gruesa dejar las láminas de berenjena reposar hasta que el agua tome un tono café. Enjuagar y utilizar.
- Cortar las berenjenas y cocinarlas de inmediato. Hay quienes dicen que el amargo viene porque “se oxida” con el ambiente. Si las dejamos peladas y cortadas crudas por mucho rato, pueden ponerse amargas y tomas un color café.
Luego de todas las advertencias ¡comencemos! Para el relleno 1:
250 gr de carne molida
1 cebolla mediana
Salsa de tomate
Orégano
Sal y pimienta
En una sartén cocinar la cebolla y la carne, cuando estén listas agregar la salsa de tomate y condimentar con sal, pimienta y orégano.
Para el relleno 2:
Una bandeja de champiñones
1 paquete de choclos congelados (no estamos en época de choclos enteros, eh.)
1 tarrito de crema
Descongelar el choclo y mezclarlo con los champiñones cortados en láminas. Agregar la crema y condimentar a gusto.
Armado:
En una fuente para horno colocar una base de láminas de berenjenas y luego una capa de nuestro “relleno 1” (carne y tomate); continuar con otra capa de berenjenas y sobre ellas el “relleno 2” (choclo y champiñones), y así sucesivamente.
Terminamos con una capa de berenjenas y, si les gusta, agregamos queso en láminas o queso rallado. Colocar en el horno ya precalentado por 20 minutos a fuego fuerte.
¡Y listo! Disfrutamos de una exquisita lasaña diciéndole adiós, aunque sea por un rato, a las masas.
¿Has probado otras recetas quitándole la harina a su preparación?