Montréal es una de las ciudades francófonas más pobladas del mundo donde también se habla inglés, español, portugués, y otras lenguas gracias a la diversidad de inmigrantes instalados en Canadá, lo que a mí parecer le da a esta ciudad una vibra muy amigable.
El nombre de esta ciudad, que en realidad es una isla, proviene de un monte llamado Mont-Royal que se ubica en el centro de la ciudad. Antiguamente royal se escribía real como en castellano, así que todo junto daba Montréal.
Cuando supe que era una isla me sorprendí mucho y pensé que debía de ser muy especial y no me equivoqué, porque cuando puse un pie en ella me enamoré.
Donde sea que vayas la arquitectura te dejará perpleja. Por ejemplo, el “Viejo-Montréal” (Vieux-Montréal) se caracteriza por ser el centro histórico de la ciudad con pequeñas callecitas que te dan la impresión de estar en Europa, pero no! estás en Norteamérica.
En esta parte de la ciudad puedes visitar la hermosa basílica de Notre-Dame, la plaza de Armas, los muelles del Viejo Puerto o tomar una excursión por el río Saint Laurent cuando el clima es bueno (primavera-verano). Muy cerca de acá está China Town donde de verdad te sentirás como si estuvieras en Asia.
Para transportarte en la ciudad puedes hacerlo a través del metro y buses los que te permiten ubicarte fácilmente. Pero te recomiendo usar 100% la bicicleta. Montréal cuenta con una extensa red de ciclovías que están interconectadas por toda la ciudad. El servicio Bixi te permite arrendar bicicletas con las que te podrás mover de manera cómoda y barata.
Te recomiendo visitar esta ciudad en el verano donde podrás andar en bicicleta, descansar en los múltiples parques que componen la ciudad para luego ver un concierto del Festival Internacional de Jazz en medio del centro. O también puedes ir al parque Jean Drapeau para disfrutar de la mejor música electrónica en Piknic Électronik. Acá puedes llevar tu propio picnic para disfrutar de un día entero en este hermoso parque.
Montréal tiene de todo. Puedes pasar el día entero en el centro donde encontrarás las más reconocidas marcas de ropa en grandes malls, o si lo tuyo son los museos, puedes visitar el museo de Bellas Artes, el museo de Ciencia Natural de Mc Gill, el Museo de arte contemporáneo, la Biosfera, entre otros.
El barrio de moda lleno de pequeños y hermosos cafés es Mile-End. Acá encontrarás buena comida, tiendas lindas llena de ropa seleccionada con pinzas, librerías y disquerías. De acá te vas caminando al barrio italiano La Petite-Patrie donde disfrutarás de las pequeñas casas y restoranes de pastas.
El mercado Jean-Talon te refrescará el paladar con sus frutas, jugos, platos típicos de la zona, millones de quesos, cervezas de Quebec, frutas orgánicas, pasteles de todas partes del mundo, y todo lo que se te venga a la cabeza.
Como ven Montréal es un lugar maravilloso totalmente recomendable para que pasen una estadía memorable e inolvidable. Puede ir en pareja o solos, ya que su gente es muy amistosa y harán amigos sin problemas donde quiera que vayan.