¿Cuál es la frecuencia ideal para tener sexo con tu pareja?

Hay preguntas complicadas y ésta. Es que se trata de un tema que entra fijo en el ítem “discusiones de pareja” porque, normalmente, lo que está bien visto por uno, está mal visto por el otro. Típico que aparecen comentarios como “es que mi amiga me dijo que lo hacían tantas veces por semana y nosotros no”, o “es que te pones cariñoso sólo cuando quieres eso”.

Bueno, queridas amigas, hoy les daremos la respuesta a aquella preguntita hincha pelotas que puede llegar a arruinar relaciones firmes como piedra: NO EXISTE UNA FRECUENCIA IDEAL PARA TENER SEXO. Corta. No la hay.

Perdón si las defraudé con la respuesta, pero después de mucho buscar resulta que varios especialistas concuerdan con que lo importante no es la cantidad de veces que lo hacemos en la semana: lo que importa es la buena comunicación que exista en la pareja para que ambos se sientan cómodos y satisfechos sexualmente.

Por supuesto, existen algunas líneas generales que indican que los principales factores que afectan  la frecuencia sexual son la edad, la cantidad de tiempo que llevan juntos, las actividades diarias (asuntos emocionales, mentales y contextuales), la fase en la que se encuentre la pareja e incluso, las condiciones físicas de ambos.

En la página web del psicólogo y sexólogo clínico Roberto Rosenzvaig V., podemos encontrar algunas cifras (si es que lo que buscan son números más exactos): “Al principio de la pareja, las relaciones son diarias. Luego bajan a unas dos o tres veces por semana, disminuyendo a cada quince días o una vez al mes en etapas posteriores”.

Pero me quedo con una frase para el bronce que menciona el sexólogo en uno de sus artículos: “una pareja es como un buen vino, un producto orgánico en constante evolución, por eso no hay que tener miedo a los cambios, sino al estancamiento”. Y, además, a los buenos vinos se les disfruta por la calidad, no por cantidad.

Así que lo peor que podemos hacer es ponernos a comparar lo que hacen otras parejas, porque lo que importa es la conexión que tengamos con la nuestra. Imagínense que los practican el sexo tántrico pueden pasar hasta un mes sin tener relaciones porque para ellos lo medular es la calidad del acto sexual, que puede durar una noche entera. Así que no hay excusas para acusar al otro de poca frecuencia o demasiadas ganas.

En serio, chiquillas, en temas amorosos y sexuales no importan los números, si no lo que se siente. La comodidad y complicidad son claves en cuanto a deseo se trata. Si tienen ganas, manifiéstenlo; si no las tienen convérsenlo y lleguen a acuerdos. Si el sexo es tan placentero y maravilloso, ¿para qué nos vamos a hacer dramas al respecto?

Foto CC vía Flickr.