El desorden es considerado por muchos como un gran defecto. No obstante, no somos pocas las que - producto de nuestras múltiples actividades cotidianas - no tenemos la pieza tan lustrosa como quisiéramos. Nos interesará saber que expertos han analizado el desorden, concluyendo que éste dice mucho respecto de nosotras. ¿Interesante, no? ¡Descubramos entonces qué revela el desastre que eventualmente tengamos en casa!:
1. Cubrecamas: Usar uno deslucido, que con el tiempo ha perdido la intensidad de los tonos originales, devela una vida amorosa sin brillo. Si el tuyo ya está para jubilarse, es hora de darlo de baja y comprar uno nuevo ¡cuanto antes!
2. Acumular cosas nuevas: ¿Eres compradora compulsiva? ¿Sueles gastar en cosas bellas para tu hogar o para ti misma, para luego dejarlas simplemente arrumbadas en un rincón? Ojo, que esto significa - a juicio de los estudiosos sobre el comportamiento humano - que deseas hacer muchas cosas a la vez, pero no concluyes ninguna.
3. Acumular cosas viejas: El llamado “mal de Diógenes” - que te lleva a guardar cosas “por si un día las vuelves a usar” - puede reflejar que vives en el pasado, dejando que tus ideas y emociones de entonces rijan tu presente. Si además esas cosas que acumulas están quebradas o dañadas, es indicio de que arrastras sueños incumplidos y promesas rotas.
4. Clóset: Refleja tu estado emocional. Los expertos señalan que si éste es un desastre y lo ordenas, tus conflictos internos también se resolverán. (¿Será verdad?)
5. Desorden en tu pieza: Si en tu dormitorio fácil puedes hallar oompa loompas o una entrada a Narnia (y no precisamente en los sueños), eres una persona que suele dejar cosas inconclusas, teniendo dificultades para mantener empleos o relaciones amorosas.
6. Desorden general: Mantener el caos en toda tu casa puede estar ocultando un trastorno de personalidad por evitación, en el cual buscas aislarte y mantenerte al margen de situaciones nuevas que te generan ansiedad. Es por ello que tu ropa tirada, arrugada o sucia te impide vestirte adecuadamente en ocasiones que así lo requieren, escondiendo inconscientemente que éstas te producen temor. Lo mismo si son tus recibos (living y comedor) los que parecen un escenario post - apocalíptico: en realidad buscas una excusa para no tener visitas ni una vida social activa.
En el caso que mantengas cuentas impagas arrumbadas en un cajón, lo que quieres es evadir el hecho de que tarde o temprano tendrás que pagarlas. (¡Ojo! Que tú las olvides, no significa que los acreedores lo hagan)
Así es, querida amiga. Tu desorden puede significar mucho más que el hecho de que el poco tiempo para organizarte te pase la cuenta. ¡Analiza y toma las providencias para mejorar tu casa y también tu vida!
Y bien, ¿qué problemas internos esconde tu desorden?