No recuerdo bien quién fue la persona que me enseñó esto, pero quedó absolutamente grabado en mí como una especie de ley para la vida: si uno no se quiere, no se respeta y no se cuida, es imposible que quiera, respete y cuide a otro. Vendría a ser algo así como “partamos por casa”. Y tiene toda la razón.
Y es que la autoestima es esencial para que podamos funcionar y enfrentemos la vida con las mejores herramientas que tengamos. Si no creemos en nosotras mismas, si no nos valoramos, es muy difícil que podamos levantarnos de las caídas que se nos presentan. Porque la vida es así, de dulce y agraz, de buenos y malos momentos, de alegrías y bajones.
Buscar el equilibrio y saber superar las dificultades es lo que importa, porque una de las principales fuentes de autoestima es saber que no somos perfectos y que de los errores que cometemos podemos aprender.
Si quieres tener en cuenta algunos tips para mejorar tu autoestima o mantenerla, pon ojo a este listado:
- No te compares, tu individualidad es muy importante.
- No confundas autoestima con arrogancia.
- Identifica tus miedos y enfréntalos.
- Conoce tus debilidades y fortalezas.
- Di que no cuando sea necesario, no tienes que quedar bien con todo el mundo.
- Supera la envidia y los celos.
- Diviértete.
- Valora y reconoce tus logros.
- No seas tan autocrítica, somos humanos y podemos equivocarnos.
- Toma las riendas de tu vida, sólo tú eres quien puede encender el motor para avanzar.
Presten atención a la parte donde se pregunta ¿qué es lo que me define?, ahí tenemos otra fuente inagotable de amor y confianza.
Y tú ¿ya entendiste la importancia de quererse a sí misma?
Foto CC vía Flickr.