por Karilo
Hace 7 meses estoy felizmente pololeando (después de dos años sola). Todo miel sobre hojuelas: cumple con lo necesario, es amoroso, tranquilo, sin vicios, canta espectacular y es el mejor compañero, amigo y amante. ¿El problema? ¡es mamón! Sus padres son de una religión bastante estricta y - aunque saben de mi existencia - no creo que tengan intención de conocerme: aparte de no adherir a sus creencias, soy madre soltera y un año mayor que su hijito.
Me pone triste que tenga que mentir y omitir: pasamos una semana de vacaciones fuera de Chile y él tuvo que decir que iba con un amigo ¡OMG! Me negó para que mi suegra no preguntara dónde dormiríamos y cosas por el estilo. Además, cuando salimos de noche tiene que decir que aparte de mí van otras personas (para que ella no imagine nada). Nunca ha llevado pololas a la casa y ésta es su relación más larga. Hasta ahora su mamá cree y espera que su hijo sea virgen, ¡valor! Ya tiene 27 años, es profesional e independiente.
¡¡No sé qué hacer!! Me encanta estar con él, pero me mata las pasiones tolerar las mentiras que lea dice a padres para que no se molesten con él.
Su círculo social me conoce y me acepta de lo más bien, pero mis suegros...ni hablar. Últimamente estoy muy confundida y he pensado que sería mejor dejar todo hasta acá, pero nos llevamos bien y somos felices.
¿Qué harían ustedes en mi lugar?