Neosolteros: Vivir en función de sí mismos

Vivir en pareja es exquisito.  Compartir lo cotidiano con aquella persona en que te fijaste y de la cual - tras conocer en profundidad sus virtudes y defectos - te enamoraste.  Amanecer cada día abrazados y juntos (con voluntad), superar los problemas que provoca el simple y claro hecho de ser diferentes.  Acompañarse, apoyarse y contenerse en el largo - pero interesante - camino de la vida.  Es a lo que muchas aspiran, ¿no chicas?  Porque sí que es lindo.  Y varias -  mientras llega el indicado -, disfrutan de la soltería, que también es genial: viajes, carretes y proyectos personales.

Sin embargo, ¿qué pasa cuando en esa “espera” resulta que te gusta la vida en soledad? ¿Si te sientes plena, satisfecha y no necesitas más?  O bien, ¿si tu carrera YA satisface todas tus expectativas, sin dejar lugar a más?   Bueno, si es tu caso, te cuento que eres una “neosoltera”.

Los “neosolteros” corresponden a una nueva tendencia que la sociología analiza.  Se trata de personas jóvenes que se sienten plenas con la satisfacción individual que son capaces de proveerse.  Tienen poder adquisitivo y pueden darse pequeños gustos (como conocer el mundo o invertir en belleza), ya que no tienen una pareja o hijos de quienes preocuparse o con los que compartir tiempo y dinero.  Y ojo, es por opción.  Ellos son felices así. Y no piensan cambiar su condición ¡nunca!.

La carrera que escogieron les apasiona y podrían dedicarle todo su tiempo, ya que no habrá “factura de sentimientos” por la devoción que ésta les genera.  Tampoco el clásico reclamo de que “tu pega te absorbe”. Gastan importantes cifras en sus hobbies, tales como yoga, videojuegos, danza o deportes extremos. Si quieren sexo, salen a buscarlo y no se implican en mayores compromisos.  Todo el dinero que perciben lo destinan a sí mismos y no requieren de nadie más para sentirse a gusto.  Suelen ser nómades y radicarse en distintos países o ciudades si se les pega en gana.  Simplemente, van tras su bienestar, haciendo lo que quieren en el momento que les place.  No se complican por nada.  Tampoco esperan que llegue “ese amor” que les mueva el piso y los saque de su individualismo: ya encontraron a la persona más importante de sus vidas, a quien aman por sobre todo y que desean hacer feliz hasta la muerte: ellos mismos.

Cada quien es dueño de buscar la felicidad y autorrealización de la manera que mejor estime.  Por lo tanto, si eres una neosoltera y te sientes a gusto con tu forma de ser ¡felicidades!  Personalmente, creo que aunque las relaciones con otros puedan resultar complejas, no hay cosa mejor que tener a alguien que te espere y a quien le importes.  Esa persona maravillosa con la cual a veces discutes, pero que siempre está cuando la necesitas.  Y con quien puedes celebrar tus logros de cada día o llorar las derrotas.  Puede que no esté en este momento (y que existan varios intentos fallidos para encontrarla); no obstante, siempre aparece alguien que a una le mueve el piso (y ojo, no necesariamente una pareja: un hijo, una mascota, un amigo) No se trata de "necesitar" a alguien para ser feliz, sino de compartir tu felicidad con otros. Pero bueno, en el mundo hay lugar para todas las visiones y es justamente la diversidad la que lo hace rico, variopinto.  Además, ¡siempre es espectacular quererte, regalonearte y disfrutar de tu propia compañía!

Y tú, ¿te sientes una neosoltera?

Foto CC vía Flickr