Llegó el temido marzo, y con él, la avalancha de responsabilidades que implica el regreso a la vida rutinaria, ya sea laboral o académica. Y a la mayoría de las personas, el volver a adaptarse a esta rutina supone una gran molestia, que se termina traduciendo en distintos grados de estrés.
Pero psicológica y físicamente hablando, el estrés no es algo malo, ya que significa que nuestro organismo se intenta adaptar a una nueva situación, utilizando el máximo de “recursos” disponibles dentro nuestro. Es por esto que cuando uno debe hacer algo rápido o urgente, nos aceleramos y nuestra atención se centra sólo en aquel asunto.
Los principales síntomas de que estamos sufriendo de estrés postvacacional son:
1. Pereza y flojera extrema.
2. Insomnio y problemas de sueño
3. Bajo rendimiento laboral y/o académico
4. Irritabilidad
5. Ansiedad
6. Pérdida de apetito
Ahora bien, es cierto que ésta es una reacción normal ante la reincorporación a pegas o clases y debe durar a lo más un par de semanas. Pero si estas molestias se prolongan por más de 2 meses, sería bueno que lo tomaras con mayor seriedad acudiendo a algún especialista para que te ayude.
Pero, ¿para qué ser tan extremistas?. En Fucsia te daremos una serie de tips para controlar este estrés antes que se salga de tus manos, de manera de enfrentarnos de la mejor manera a este nuevo año laboral/académico que comienza:
- Anticipación: en este sentido, es importante que al menos unos días antes de volver a tu rutina vayas reordenando tus horarios de sueños y comidas, para que el cambio a nivel físico no sea tan grande.
- Ya estando en la pega/universidad, en lo posible empieza por las labores que te sean más amenas, adaptándote de a poco.
- Aprovecha el horario de colación para relajarte y desconectarte. Haz vida social/familiar, y no converses sobre trabajo o estudios.
- ¡No te lleves pega para la casa! Esto sólo hace que el estrés te siga donde vayas. Es necesario desconectarse tanto mental como físicamente.
- Duerme la cantidad de horas necesarias para descansar bien; esto es, alrededor de 8 horas.
- Organiza tus tiempos diarios, estableciendo algunos horarios. Por ejemplo, a las 20:00 tomar once/cenar; 22:00 tiempo límite en que debes preparar tus cosas para el otro día, etc.
- Permitirte actividades recreativas, como ir a tomarse algo con amigos, salir a comer o ir al cine, cosa de disfrutar de tu vida y no vivir sólo para trabajar/estudiar.
- Finalmente, el mejor consejo que puedo darte es tratar de siempre tener una actitud positiva con el entorno. Ya sea con tus compañeros de trabajo, universidad o con tu familia. Trata de valorar lo bueno que tienes y que te rodea, y verás cómo las cosas van saliendo mejor.
¿Lista para enfrentar un nuevo ciclo con optimismo?
Foto CC Vía UrbaneWomenMag