Aunque los sostenes son una prenda básica para casi todas las mujeres del mundo, ya sabemos lo difícil que puede ser encontrar ese par que se ajuste bien a nuestro cuerpo y a nuestros gustos; por eso, cuando por fin encontramos ese modelo que nos queda perfecto, debemos darnos el tiempo para cuidarlo como se merece, especialmente a la hora del lavado. ¿Complicado? Bueno, esperamos que estos tips puedan ayudarte a simplificar esta tediosa pero necesaria tarea. A tomar nota:
1.Lavado frecuente: Nuestra ropa interior es fundamental para nosotras, ya que nos acompaña durante todo el día, estando constantemente en contacto con nuestra piel. Por eso, aunque muchas veces no nos demos cuenta, nuestros sostenes pueden absorber gran parte del sudor y la suciedad que expele nuestro cuerpo. Un lavado y un recambio frecuente de nuestros sostenes nos hará sentirnos más frescas, pero también ayudará a prolongar la apariencia de nuestras prendas favoritas.
2.Cuidados básicos: ya sean de encaje y armados, o deportivos y sencillos, nuestros sostenes son prendas delicadas que requieren cuidados especiales, todo en función de perpetuar su vida útil como principal soporte de nuestro busto. Para esto, lo más recomendado es lavarlos siempre con agua fría para no dañar sus telas y elásticos, y mano, para no estropear la estructura de nuestras prendas, como el relleno o las barbas. Lo mejor, además, es usar detergentes suaves, que no vayan luego a dañar la piel del pecho, una de las partes más delicadas de nuestro cuerpo.
3.¿Y la lavadora?: Si bien lo mejor es lavar tu ropa a interior a mano, ayudarte con la lavadora no necesariamente terminará por matar tus sostenes favoritos. Para esto, debes utilizar esas prácticas bolsitas de malla (como las que vienen al interior de los trajes de baño masculinos). Así evitarás que tus sostenes se retuerzan o se enganchen con otras prendas al interior de la máquina, y que puedan deformarse de manera irreparable.
4.Lavados suaves: Si estás fuera de casa o perdiste tus mallitas para lavar ropa interior, no desesperes. Lo mejor en estos casos es escoger un programa de lavado delicado (o lo que más se le parezca) y una carga pequeña de ropa (preferente otras prendas interiores como calzones o medias), para asegurarte que el lavado sea profundo pero suave. Una segunda recomendación: asegúrate de tus sostenes estén abrochados antes de echarlos a la lavadora, para minimizar la posibilidad de se enganchen o enreden durante el lavado.
5.Evita la secadora: todas sabemos cómo nos ayuda una buena secadora, sobre todo cuando estamos apuradas o durante los días de invierno; pero para el caso de tu ropa interior, ésta no es siempre la mejor opción. Dejar tus sostenes secarse al aire libre, asegurándote de que no quede humedad en el relleno, es lo mejor que puedes hacer para que luzcan lindos y como nuevos por más tiempo.
Y tú, ¿cómo cuidas tu ropa interior?
Imagen CC vía Wikipedia