Para quienes somos creyentes, Tierra Santa es quizás uno de los destinos más fascinantes que podríamos soñar. Especialmente, tratándose de parajes llenos de encanto, escenario de las historias bíblicas que oímos desde niñas.
Aunque no he tenido oportunidad de ir, sí conozco a quienes lo han hecho. Y dicen que los lugares visitados son ciertamente mágicos. Una de mis contactos es incluso agnóstica y aún así, no pudo dejar de sentirse maravillada y sobrecogida ante tal belleza, ni tampoco evitó inundarse con la increíble energía de aquellos lares.
Lo más recomendable para ir desde Chile es contratar un tour que te permita conocer los múltiples imperdibles que ofrece Tierra Santa. Gracias a esta alternativa, además, los pasajes aéreos y el alojamiento ya no serán una preocupación. Para contratarlo, debes cotizar con tu agente de viajes. Empresas como Falabella Viajes, Travel Security, Cocha y Greenland Tour ofrecen interesantes paquetes; lo que sí, deberás disponer de bastantes días de asueto para sacar el máximo provecho a este viaje de ensueño.
Otro aspecto a considerar es la seguridad, ya que es sabido que Israel es una zona en permanente conflicto con Palestina, por lo que conviene estar permanentemente informado sobre la contingencia en la zona. No obstante, mis conocidos que han viajado señalan que la estada allá es más bien tranquila y sin sobresaltos. La delincuencia en las ciudades es prácticamente nula y los controles son muy estrictos: hay detectores de metales, policías y militares en todas partes, además de cámaras estratégicamente ubicadas. El lugar a evitar es, obviamente, la Franja de Gaza.
A continuación, te detallo cuáles son los puntos que no debes dejar de visitar (tienes que fijarte que el tour que contrates los incluya, pues - según me han dicho - son bellísimos)
1. Tel-Aviv: Esta ciudad te impresionará. Hermosa, moderna y con mucha cultura.
2. Masada: Emplazada en pleno desierto de Judea, es el sitio donde se encontraba el Palacio de Herodes el grande. Ciertamente bellísima. Me la recomendaron calurosamente. Vale la pena visitarla.
Foto CC vía seetheholyland.net
3. Mar muerto: Tremendamente salino, de él extraen los mejores y más caros exfoliantes para la piel. Tiene tanta sal, que puedes flotar en sus aguas sin problemas.
Foto CC vía israeltourism
4. Jerusalén: Un destino maravilloso e imperdible, que paga con creces el viaje. Dicen que pasear por sus calles te transporta en el tiempo. No puedes dejar de visitar el Muro de los Lamentos, la Vía Dolorosa o las mezquitas, que te llevarán al corazón de las historias bíblicas. Además, mis amigos que fueron sin tour, vieron en esta ciudad una “ubicación estratégica” para recorrer hermosos pueblos interiores.
Foto CC vía Jasonwain
5. Belén: Es el lugar donde Jesús nació y, en atención a este hecho, encuentras allí las más hermosas iglesias.
Foto CC vía ChrisYunker
Este es sólo un barniz de todo lo que puedes encontrar en un destino indiscutiblemente inolvidable. ¡Podría llenar páginas con todas las maravillas que me han contado, fotos incluídas! Ya quiero ahorrar para poder ir y sumergirme en lo profundo de la historia. ¿Y ustedes?
Foto CC vía Flickr (P Medved)