Si estas en búsqueda de una nueva rutina de entrenamiento (ya sea para bajar de peso o mejorar tu condición física) te recomendamos esta disciplina que se encuentra en auge y te va a hacer sudar como ninguna: Crossfit.
Es un método basado en ejercicios funcionales y variados, ejecutados a alta intensidad. Este tipo de ejercicio (valga la redundancia) recluta varios músculos y articulaciones. Enfatizan en los movimientos y en la función del músculo, no en su forma. Al contrario de los de aislamiento, que buscan localizar un área del cuerpo, los ejercicios funcionales involucran más de una articulación, son divertidos y seguros, y se aprenden en forma progresiva. Además, buscan generar potencia en los músculos más grandes del cuerpo y transferirla a los más pequeños, del centro a las extremidades. Mueven grandes pesos, a considerable distancia y alta velocidad. Es el tipo de entrenamiento elegido por academias de policía y equipos de operaciones tácticas, unidades militares, campeones de artes marciales y centenares de atletas alrededor del mundo.
Este sistema intenta mejorar varias capacidades físicas al mismo tiempo:
- Fuerza
- Resistencia Cardiovascular / Respiratoria
- Resistencia Muscular
- Flexibilidad
- Potencia
- Velocidad
- Coordinación
- Agilidad
- Equilibrio
- Precisión
Promueve rutinas de entrenamiento muy variadas, conocidas como WOD’s (Workout of the day – Entrenamiento del día), que se modifican según el nivel del participante. No se sigue un patrón definido como en las rutinas tradicionales, sino que se toma una cada día que toque entrenar y se ejecuta, normalmente procurando hacerlo en el menor tiempo posible.
Aunque a simple vista parece netamente masculino es muy utilizado por mujeres ya que provee beneficios tales como:
- Perder grasa corporal: Las mujeres que practican entrenamientos de fuerza aumentaran su masa muscular, pero perderán más del triple de grasa después de un mes de estos entrenamientos. Además cada libra de músculo que obtienes ayuda a quemar en promedio cerca de 50 calorías más.
- Ser físicamente más fuerte: Uno de los objetivos del Crossfit es poder llevar lo aprendido a la vida cotidiana u a otros deportes por lo tanto ser más fuerte te ayudará en todos los aspectos de tu vida. Desde escalar una montaña hasta las tareas más sencillas y simples alrededor de la oficina o el hogar.
- Ganar fuerza, sin aumentar tu volumen: La cantidad de hormonas de crecimiento es naturalmente más baja en las mujeres que en los hombres, lo que impide que se gane volumen de la misma manera. Los ejercicios dinámicos y de fuerza te ayudan a aumentar tu fuerza y sobre todo la definición de tu cuerpo sin enfocarse en el volumen.
- Evitar Osteoporosis: La pérdida de calcio en las mujeres suele ir aumentando con los años o los embarazos. Los entrenamientos de fuerza, aumentan los niveles minerales de los huesos y su densidad.
- Reducir el riesgo de enfermedades del corazón: Este beneficio es para ambos sexos, pero es tan importante que no lo podíamos dejar pasar. La combinación de ejercicios de fuerza con entrenamientos cardiovasculares te ayudan a tener un entrenamiento completo.
- Mejorar la actitud: Además de el ejercicio físico, la comunidad de CrossFit suele tener un gran espíritu de compañerismo. Tiene espíritu de equipo aunque no se trate de una competencia, ya que se animan y motivan mientras realizan las rutinas.
- La edad no es un problema: Se ha comprobado que las mujeres de hasta setenta u ochenta años, presentan grandes beneficios de un entrenamiento de fuerza. Así, mientras puedas hacer ejercicios de alta intensidad estarás ayudándote para futuro.
- Pueden llegar a ser mejores que los hombres: En ejercicios que requieren estabilidad o elasticidad, en muchas ocasiones las mujeres tendrán mayor habilidad y realizarán correctamente los ejercicios.
¿Y tu que esperas para probar esta nueva tendencia para ponerte en línea? ¿Te animarías con el CROSSFIT?
Foto vía Wikipedia