Pequeñas cosas terribles: caminar con zapatos duros

Más de alguna vez hemos tenido que vivir la incomodidad de caminar con zapatos nuevos y duros. La tortura que provoca el calzado nuevo es terrible: heridas, ampollas e incluso callos, que soportamos estoicamente por amor al calzado.

En lo personal no puedo evitar comprarme zapatos y usarlos al segundo día. A veces el dolor de botas o tacos nuevos es insoportable y lo único que quiero es sacármelos. Pero ¡calma! que para este lamentable problema hay más de una solución, así es que te cuento algunos secretos que averigüé para ablandar tus zapatos y amoldarlos a tus pies:

1. Untarlos con crema humectante hace que el cuero se suelte y así se amolde con mayor facilidad.

2. Haz una bola grande de diario y luego humedécela con agua. Enseguida, métela dentro de tus zapatos y déjalos así durante dos días. Es importante que el diario quede bien apretado para que tenga el efecto que buscamos.

3. Meter tus zapatos en una bolsa plástica y luego, ponerlos en el congelador por una noche o por dos días. No volverán a incomodarte nunca más.

4. Otro truco es pasarles un algodón con alcohol en las partes que te incomodan para ablandarlos.

Espero que estos consejos te ayuden a aliviar el problema de caminar con zapatos duros, y que tus pies no sigan sufriendo esta pequeña "gran" cosa terrible.

Imagen CC extraitaly