Cuenta la leyenda de un joven muy responsable, educado y caballero, que tenía una polola preciosa y muy inteligente, pero él no estaba conforme. Así es que un día decidió crear otro perfil en Facebook, para agregar sólo a una persona: una mujer que conoció en una fiesta y no se pudo sacar de la mente.
Para lograr su plan, no halló nada mejor que crear esta nueva cuenta con su segundo nombre y segundo apellido. "Un plan perfecto” si no fuera porque su polola lo pilló a la semana, debido a que Facebook le recomendó posibles contactos que podría conocer. ¡Y vaya que lo conocía!.
Final de la historia: un 'tontito' pateado, solo, abandonado y una chica libre de pololear con un pelotudo. La moraleja de la historia es que Facebook siempre te delata, porque detecta tus afinidades y "Likes", y va recomendando amigos o personas que de alguna manera tienen similitud contigo.
Pero, ¿por qué crear un perfil falso? Simple: porque quieren hablar tranquilos con alguien que les llamó la atención, sin ser detectados por sus parejas. Cobardía pura, pues no son capaces de ir con la verdad por delante y decirles a sus polol@s que ya no sienten lo mismo y necesitan terminar la relación.
Así es que ojo con los personajes que sólo tienen un amigo en Facebook: probablemente estén casados o tengan polola. De todas formas, resulta sospechoso alguien con tan poca vida social.
Imagen CC Owen W. Brown