Muchas de nosotras hemos escuchado el tan acertado dicho 'el que ama de verdad te deja ir'. Por supuesto, ya que el verdadero amor libera, deja que el otro siga su camino y por lo mismo, su crecimiento personal.
En algunas ocasiones nos aferramos mucho a alguien, ya sea pareja, amigo, familiar; pero llega un momento en que esa persona evoluciona distinto y debe seguir su rumbo. Es muy doloroso y complejo de entender, pero por nuestro bien y el del otro debemos dejarlo. De esta manera lo estaremos ayudando para que, si en algún momento la vida los quiere volver a unir, estén mejor preparados en todo sentido.
Por ejemplo, en las relaciones de pareja empiezan a desencadenarse muchas peleas y malos entendidos. Aunque exista mucho amor, puede ya no ser lo mismo. Aquí lo importante es dejar de 'obsesionarse' con la idea de que el otro debe estar pegado a uno y dejarlo ir por sanidad mental. No buscarlo durante un tiempo. En otras palabras, dejarlo ser libremente.
En una amistad también es lo mismo: cuando estamos muy apegadas a nuestras amigas o sentimos que dependemos de ellas, al punto en que no vemos que también tienen problemas y ocupaciones. Si estamos exigiéndoles demasiado, siento que lo mejor que podemos hacer es distanciarnos un rato. Hay veces en que ambas tenemos problemas y no nos logramos entender. En esos casos, hay que dejar que cada una piense por su lado y evolucione, reparando en sus errores. Sólo entonces y podrán reiniciar esa hermosa amistad que las unió desde un principio.
Es complejo, ya que todos tenemos nuestras diferencias, y cuando éstas se tornan insostenibles, lo mejor es soltar y dejar que la vida fluya. Sin complicarse, ni atarse a nadie. Por eso siempre dicen que nunca hay que forzar las cosas, porque de esa forma no funcionarán.
Así es el amor a todo nivel. En el caso de la familia, si decidimos partir a otro lugar nuestros seres queridos deben entenderlo, dejarnos ir y no presionarnos. Cada uno tiene su propio camino, su destino y por lo mismo debemos luchar sin perder oportunidad.
Y así es, el que te ama de verdad lo entenderá y te dejará ir. El que no, suele ser un ser egoísta que jamás entenderá tus motivos, tus sueños y solo se apegará a la idea de que tienes que estar con él.
Pero estos puntos amigas, lo vamos entendiendo con el tiempo, no es tan fácil. Créanme que cuando lo podemos comprender nos sentimos realmente libres y con una tranquilidad infinita llamada felicidad.
Y ustedes ¿saben dejar ir?
Imagen CC LuisVilanova