La mayoría de las mujeres luchamos para no subir de peso y debemos pasar de dieta en dieta, para intentar mantenernos en buena forma. Muchas veces es necesario "decir adiós" a las comidas ricas, las frituras, el alcohol y los chocolatitos y de paso, también un poco a ser felices. Sin embargo, hay personas que comen todo lo que quieren y más, pero no suben de peso. Son aquellos que tienen el superpoder de no engordar.
Lo curioso de todo esto es que he escuchado a más de una mujer que posee este don, sufrir por no poder engordar (leyeron bien, quejarse por no engordar). Es una lucha con los kilos, pero a la inversa ya que comen y comen para subir el número en la balanza, pero los esfuerzos suelen no rendir frutos. Para mí, que siempre he sido de "huesos anchos", es difícil entender el afán por estar más rellenitos, ya que subo de peso hasta de respirar.
Es un sueño hecho realidad no contar las calorías, no preocuparse de las constantes subidas y bajadas de peso y sobre todo disfrutar de la comida. Lamentablemente, en mi caso, después de hacer "desarreglos" debo privarme de muchas cosas, para intentar revertir el "crimen" de comer más de la cuenta. Soy una mujer que gusta de la buena mesa y no soy feliz solamente con lechugas y tomates ¿es demasiado pecado?
Hace un par de años tuve un pololo que comía como puerquito, pero no subía ni un gramo. Era tan delgado que no tenía rollos, sino que al sentarse se le hacían arrugas de piel en la panza. Obviamente, al tener una relación de pareja sales más a comer y terminas aumentando un par de tallas, pero en este caso yo fui la única que pagó las consecuencias. Él comía 4 veces más que yo, pero yo seguía poniéndome cada vez más ancha y al final, cuando terminamos, yo me quedé con el recuerdo de haber engordado por los dos. Mi mejor amiga también es parte de este exclusivo grupo de personas, ya que ama la comida mucho más que yo y sin duda que ingiere mayores cantidades, pero su cuerpo no la deja en evidencia.
Si pudiera pedir un deseo y me dieran a elegir entre el superpoder de no engordar y ser la mujer con mejor suerte en el amor, mi prioridad sin duda sería tener mi guatita llena, corazón contento y cuerpo sin pagar las consecuencias. Es un don, una bendición y un privilegio que aquellos que lo poseen, deben cuidar y disfrutar al máximo.
Y ustedes ¿conocen a alguien con este superpoder?
Imagen CC Alessandro Valli