por Javilop
Hace días vengo pensando lo mismo, después de una frase que me dijo una amigo-no cercano- tras comentarle acerca de una discusión con mi pololo. La reflexión que rompió mi rosario de quejas y demases fue la siguiente: "el problema aquí no es lo que haga él, sino lo que TÚ quieres que haga".
Mi primera impresión, claro, fue de una defensa corporativa de machos alfa. Pero luego de leer entre líneas, comprendí que mi amigo tenia bastante razón. Muchas veces somos nosotras mismas quienes ante una pregunta, acción o simple gesto esperamos que nuestro hombre reaccione de manera similar-por no decir igual- a lo que haríamos nosotras. ¡Craso error, amigas! Antes de reclamar cualquier cosa, debemos pensar que por naturaleza son seres que tienen un razonamiento distinto al nuestro, lo que también los hace fascinantemente sorprendentes.
Debemos recordar siempre que la esencia de una persona es lo que nos enamora. Si algo nos molesta, es lógico expresar nuestros sentimientos, pero no podemos sentirnos mal o decepcionarnos de esa persona si no actúa de la manera que esperamos. Con esto digo que no pretendamos cambiar ni dirigir sus actitudes, ni mucho menos imponer nuestras visiones respecto a un tema en particular. Creo que lo mas importante de todo lo aprendido es que la comunicación es fundamental y gracias a eso es posible llegar a acuerdos en un dos por tres, en lugar de lamentarnos con amigos...
Ustedes, ¿qué opinan?
Imagen CC Zé Pinho
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