¿Cuántas veces, al realizar un test de embarazo y ver su resultado negativo, suspiramos (aliviadas o resignadas, de acuerdo a la intención) y nos quedamos “tranquilas”? Serenidad que sólo dura un par de días más, ya que el periodo continúa sin aparecer y los síntomas de cargar una nueva vida en el vientre se presentan de manera sorpresiva. Entonces, nos preguntamos: ¿fallan estos artilugios? ¿Es posible que tengamos un falso resultado?
La respuesta, amigas, es que sí, fallan. Pero bajo determinadas circunstancias. ¿Quieres saber cuáles son? ¡Te contamos!
-
Tomar la prueba demasiado pronto: Si aplicas el test inmediatamente después del coito o habiendo transcurrido menos de 10 días, será difícil que el dispositivo detecte la hormona HCG (Gonadotropina coriónica orgánica), responsable de la producción de placenta. Mientras menos sensible sea el test (100 UIL), más probable será que arroje un falso negativo.
-
Beber demasiado líquido antes de realizar la prueba: Mientras más diluida esté la orina, menos específico será el resultado del test, puesto que tendrá dificultades para identificar nuestra hormona. Por lo mismo, su eficacia será mayor si se practica con la primera orina de la mañana, más concentrada.
-
No seguir las instrucciones del test al pie de la letra. Es fundamental que leas con detención los pasos a seguir y cumplas con ellos, ya que saltar alguno puede significar que el test no sea preciso y su resultado, mentiroso.
También puede ocurrir - aunque con menor frecuencia - que el resultado sea erróneamente positivo, bajo las siguientes condiciones:
-
Óvulo fecundado que no llega a implantarse: Debemos considerar que muchos embarazos terminan antes de la cuarta semana, sin que siquiera alcancemos a percatarnos de nuestro estado. Por eso es que la hormona HCG alcanza a producirse y - eventualmente - ser percibida por algún test. Esto se conoce como embarazo químico.
-
Tratamiento de fertilidad: Si te estás sometiendo a este procedimiento, debes saber que se te está suministrando una cantidad de esta hormona que, si bien es ínfima, puede alterar los resultados de tu prueba casera.
-
Embarazo ectópico: Es decir, aquel que se da fuera del útero y no tiene buen pronóstico.
Por lo anterior, es fundamental que si tu prueba de embarazo dio negativo y tu menstruación aún no llega, repitas la prueba en las semanas siguientes y consultes con un especialista. Lo mismo, en caso de que el resultado sea positivo. Sólo una prueba sanguínea y una reunión con tu ginecólogo ratificarán la hermosa noticia de la maternidad.
Y tú, ¿has tenido un falso negativo en las pruebas de embarazo?