Amo a mi pololo más que a nada en la vida, por lo mismo sé que él no es una persona fácil de llevar. No es de esos que le caen bien a las personas apenas los conocen, sino que al tiempo logra ganarse al resto. Conmigo fue de otra forma, pero eso es historia para otro post.
El tema que me complica - y mucho - es que no hay feeling con uno de mis grupos de amigas. No son las que más veo, pero las quiero demasiado y me aproblema bastante la situación. Incluso antes de que comenzáramos una relación formal, yo ya me imaginaba que esto iba a pasar, ya que son demasiado distintos. Ellas no me lo han dicho, pero se nota mucho que no lo pasan y él ya me ha comentado que de verdad no siente cercanía con ellas.
A él lo amo, tenemos planes juntos y no voy a dejar de lado a mi proyecto de vida por mis amigas, pero también ellas han sido mi gran apoyo de antes de conocerlo, nos queremos mucho, lo pasamos bien y estamos siempre en las buenas y en las malas. Por eso, tras mucho pensar, decidí qué hacer para no tener problemas con ninguno de los dos:
Lo primero, no imponer mi pololo a mis amigas. Cuando estaba soltera pasé muchas veces por esto. Amiga enamorada llevaba al pololo a todas nuestras reuniones, lo que terminaba siendo incómodo, ya que no podíamos hablar de todas las cosas. Yo decidí no llevarlo cuando me junto con ellas. Ni siquiera pregunto si es con parejas, ya que sé que será un momento incómodo para todos.
No llegar a contarle a él los problemas de mis amigas. Muchas veces por querer ayudar, una cuenta a otra persona lo que le pasa a una amiga, para que te den una nueva visión de qué ocurre. Como sé que él no las quiere mucho, no voy a perder el tiempo en intentar causar empatía. Le cuento otras cosas respecto a ellas, pero eso no.
No hablar con las amigas apenas acabo de discutir con él. Sí, muchas veces cometemos el error de tomar el teléfono apenas discutimos con nuestro pololo, sólo para descargarnos y agrandar las cosas. Acá - como todo en la vida - hay que dejar de pensar en caliente, contar hasta 100 y pensar. Cada vez que les cuento a ellas un problema, les doy más razones para que les caiga mal.
Tratar de desarrollar actividades distintas con las amigas. No siempre juntarse al happy hour o a almorzar. Hacer otro tipo de cosas para que no todo sea conversar sin parar. No es muy difícil llegar al tema de los pololos en una charla. Por eso, ir al cine, al teatro, conciertos y hacer deporte juntas son buenas formas de pasar el tiempo.
Cuando ya no te queda otra - por ejemplo en matrimonios o cumpleaños - hablar con ellos previamente. Yo le he dicho a mi pololo que sea un poco menos apasionado en sus ideas respecto de ellas y a las chicas que sean más tolerantes con él. Así hemos logrado pasar ratos agradables sin echar a perder la celebración de personas que tanto queremos.
No ha sido fácil, pero es posible poder llevar la fiesta en paz.
Y ustedes, ¿qué otro consejo agregarían?
Imagen CC Benz Iurlaro