Cuando estás en pareja, comienzan a surgir dudas e inseguridades. Pero no suelen ser a propósito del comportamiento del otro; sino que más bien te cuestionas hacia dónde se dirige la relación. ¿Cómo saber si tiene proyección? Para averiguarlo, te daré algunos tips que deberás discutir con tu almohada o mejor amiga:
1. ¿Tienen una relación estable?
Todas conocemos la fase "luna de miel". El comienzo de la relación, cuando todo es amor, nada de peleas y mucha ternura. Esa fase suele durar unos 7 a 9 meses - el tiempo es variable -. Pero, ¿después de eso siguen bien? Es normal tener peleas, pero debes considerar si existe estabilidad a grandes rasgos por parte de ambos. Si la respuesta es afirmativa, entonces es un gran paso hacia la proyección.
2. ¿Tienes tu propio espacio?
Algo que sí o sí permitirá una final feliz es respetar los espacios de uno y otro. Obviamente, si estás con la persona 24/7, eso generará más conflictos y debilitará la relación. Es importante tener tiempos, tú con tus amigas, él con los suyos. Esto no significa olvidarse del otro, pero sí compartir con distintas personas. Claramente tu pareja no es la persona ideal para hablar de depilación o dolores menstruales, ¡tus amigas sí!
3. ¿Existen intereses comunes?
Está muy bien no coincidir en todo. Si a él le gusta el azul y a ti el rosado, no debería ser un problema. Si tu novio prefiere cenar y tú tomar once, seguramente llegarán a un acuerdo. Pero si él quiere tener hijos y tú no estás interesada en los niños, puede generarse un quiebre. Hay cosas, motivaciones o etapas de la vida en que deben coincidir. En el caso de que no sea así, tarde o temprano la relación caerá.
4. ¿Hay cosas que definitivamente no soportas de él?
Cuando una está en pareja es porque quiere a la persona tal cual es. Claramente, pueden existir ciertos roces. Pero si los defectos del otro comienzan a ser grandes discusiones hay que comenzar a cuestionar: "¿Podré vivir con ese defecto para siempre?" "¿Debería él o yo cambiar ese defecto, por el bien de la relación?". Querer, en algunas ocasiones, es ceder. Si la persona te quita identidad, claramente no deben seguir juntos. Pero si hay pequeñas cosas que no son tan terribles de cambiar en pos del bien común - que es estar juntos -, entonces no debiera haber algo malo en transar.
5. ¿Te imaginas con él para toda la vida?
Ésta es la más importante de todas las preguntas que debes formularte. Porque si tú no estás motivada con compartir un futuro, es difícil que la relación vaya a llegar algún lado. Aquí no se habla de matrimonio, ni papeles, ni nada de eso. Es un compromiso para siempre, pero de corazón. Si en 10 años no te ves con él al lado, quizás debas dejarlo ir. Proyectarse es lo más importante al momento de cuestionar dónde va tu relación.
Si reflexionas estos 5 puntos, tu corazón responderá a la interrogante del rumbo que tiene tu relación: es decir, si va directo al futuro o al quiebre.
Y bien, ¿te proyectas con el hombre que hoy te acompaña o llegó el momento de decirle adiós?
Imagen CC Hernán Piñera