Ok gente, para iniciar con esto hay que entender primero que la única manera de cambiar la situación inicia en nosotras, envalorarnos, aceptarnos, etc, etc, etc. En resumen: pensamientos positivos y felices acerca de quienes somos. Ahora bien, eso suena súper sencillo cuando uno lo dice (y algo cursi), pero hacerlo cuesta y ¡harto!.
Ahora, en cuestiones prácticas, si algo aprendí durante mi adolescencia, es que siempre es más fácil creer lo peor. Es una condición de ser humano y la manera en que funcionamos. El problema está en que una vez que comenzamos a ver lo negativo, nos condicionamos y pensamos que es verdad. Así, llegamos al punto en que las cosas malas son las únicas que somos capaces de notar.
Por eso, hay que hacer cambios para pensar distinto. Es un proceso difícil, pero necesario. Requerirá disciplina, tiempo y paciencia; ya que no podemos esperar que las cosas cambien de una. Aún así, ¡hay que intentarlo siguiendo estos pasos!:
1. Cuando estés frente a un espejo, mírate a los ojos - por muy loco que suene - y di en voz alta las cosas de ti que consideras positivas, ya sean rasgos físicos o de personalidad. Tienes que nombrar como mínimo 5 de cada uno. Suena a poco, pero cuesta al inicio. Ya sea: "me gustan mis ojos" o qué bonita la forma de mis uñas y mis manos"; "soy una persona divertida, soy simpática", etc. Y visualiza lo que piensas en tus acciones cotidianas.
2. Por mucho que te digan que el físico no cuenta, es cierto que al menos "algo" nos importa a nosotras. Esto, en el sentido de que si nos sentimos bien, nos vemos bien. Entonces, trata de hacer esto al revés: usa tu perfume favorito, pinta tus uñas, ponte algo de maquillaje o viste tu ropa favorita. Haz cosas que te hagan sentir mejor respecto de ti misma; eso te dará confianza y ayudará con tu autoestima.
3. Sé paciente. Trátate con cariño y no te juzgues tan duramente si cometes algún error. Hasta los más grandes genios de la historia se equivocaron alguna vez. Cada traspié nos deja una enseñanza y nos ayuda a ser mejores. Ve entonces cada desacierto como una oportunidad y no como una falta inexcusable.
4. Rodéate de gente positiva. No sacas nada con seguir estos pasos si te juntas con personas que te tratan mal, te dicen cosas hirientes, te ridiculizan o te pasan a llevar. Es muy simple: por mucho que trabajes por ti misma, si tienes cerca a vampiros emocionales, no lograrás romper el círculo de negatividad. Por eso es muy importante que tus amigos familiares, pololos, etc. sean personas que te tiren para arriba. No digo que sean zalameros, sino que se den cuenta de lo valiosa que eres y te respetan por eso.
Por último, recuerda que todos los cambios pasan por nosotras: quiérete todos los días y recuerda que eres una persona única. No hay nadie como tú en el mundo, nadie. Y eso es una verdad irrefutable.
Imagen CC Suus Wansink