Estamos en pleno 2015, era de la conectividad total. Esto nos ha traído diversos beneficios, así como también una mayor vulnerabilidad y el riesgo latente de ser víctimas de estafas. De acuerdo con varios estudios, el grueso de la población publica demasiada información personal en Internet. Más del 90% de los chilenos tiene cuentas en redes sociales y comparte su cumpleaños, el lugar dónde vive y muchos datos más, los que son de gran valor para amigos de lo ajeno. Por lo mismo, hoy les dejaré algunos tips para evitar ser presa fácil de un engaño vía Internet.
1) Cuando les llegue un mail con un link para entrar al banco, Facebook o Twitter. Hay una técnica que se llama phishing, que despliega una página de inicio exactamente igual a las de nuestras cuentas. Nosotras ingresamos nuestros datos y lo que en realidad hacemos es enviar nuestra clave directo a los estafadores. No hagan nada sin verificar la dirección que está escrita.
2) Ojo con los "Likes" a niños enfermos o apps de concursos: Cientos de páginas obtienen nuestra información y con esto nos comienzan a ofrecer productos. Así, pasamos a integrar sus listas de "mailings" o comenzamos a ver la publicidad de sus empresas cada vez que ingresamos a la red. No pongan "Me gusta" a cualquier cosa que vean, ya que no sabemos quién está detrás de esos fan page.
3) No abran sus cuentas de mail o redes sociales en cualquier dispositivo, todo queda registrado en el equipo que se usó. Les aconsejo que cambien sus contraseñas y no tengan la misma para todas las cuentas, ya que será más fácil acceder a ellas. Si no tienen otra opción, borren el historial.
4) Activen la verificación en dos pasos. ¿Qué es esto? Muy simple. Cada vez que revisen sus cuentas a través de un computador que no es el suyo, recibirán un mensaje de texto directo en su celular, el cual les entregará una clave. Si no la ingresan, será imposible abrirlas.
5) Agreguen sólo a personas de su completa confianza. Sepan muy bien quiénes son sus cyber-amigos. Es usual que publiquemos - y nos comenten - cosas que no es conveniente que sepa cualquiera. Tal vez ellos ni siquiera usen esta información, pero el riesgo está en que revisen las redes en su universidad, oficina o un cyber café, desde el cual otros podrán acceder.
6) Mantengan su cuenta de Linkedin con los datos de contacto privados. Es bueno que se sepa nuestra experiencia profesional, pensando en un futuro laboral exitoso. Lo que no queremos es que al googlear cualquier persona tenga nuestro mail de trabajo, número de celular, dirección de casa y hasta cumpleaños. Compartan lo justo y necesario para postular a nuevos cargos, nada más.
7) Revisen los filtros de privacidad. No pongan todos sus posteos como públicos, porque cualquier persona que sepa su nombre y se meta a Google puede enterarse de qué están de viaje fuera del país por tres semanas y la abuelita quedó sola en casa.
8) Por último, nosotras somos el mejor filtro. Piensen bien qué van a postear en una red social antes de hacerlo. ¿Es necesario que todos sus contactos vean las fotos de sus hijo? ¿Quiere saber tu compañero de tercero básico que estás peleada con tu pololo? Por lo mismo, filtremos bien nosotras, que depende de cuánto entregamos cuánto sabe el resto
Ya amigas, esperemos que con estos datos anden más seguras y tranquilas. No dejen de publicar y participar en redes sociales, pero háganlo con más cuidado, que nunca se sabe quién puede estar leyendo al otro lado de la pantalla.
Imagen CC Don Hankins