Hace un par de años, amaba los inviernos. Me encantaba ver las gotas de lluvia adheridas a las ramas de los árboles, ya que parecían ser florecientes cristales. La idea de reunirnos en familia frente a la estufa, a compartir una taza de té y unas sopaipillas era deliciosa. Además, ¡mi hijo nació a fines de junio! ¿Cómo no amar dicha época del año?
Como partí diciendo, deliraba con los inviernos, hasta que mi viejita contrajo una influenza full agresiva, que la llevó al hospital y nos tuvo muy preocupados. Desde entonces, cada nueva época de frío, debemos extremar sus cuidados. Esto hace que los meses boreales sean menos amigables ante mi perspectiva, anhelando pronto pasar agosto y que la primavera vuelva a llenarnos de vida.
Además, convengamos en que los meses más helados coinciden con la temporada de exámenes, certámenes, controles, interrogaciones y demases. Conjunto con la baja de defensas, es un periodo vertiginoso, en el que estamos mega exigidas. Sin embargo, este año me propuse disfrutar cada minuto de la vida, y la estación que se avecina no será la excepción. Es verdad que estamos más vulnerables; sin embargo, siempre hay medidas que podemos tomar - tanto nosotras como nuestros cercanos - para controlar el estrés y mantener la salud, evitando que el invierno se transforme en un infierno. ¡Les comparto las que mejores resultados me han dado!:
1. Vitaminas para todas: En el mercado puedes encontrar gran variedad de productos, que aportan vitaminas esenciales para mantener las defensas en alto. Los hay de prestigiosas marcas, como Bion, Centrum y Supradyn, por nombrar algunos. Sin embargo, en la medicina natural también puedes hallar alternativas, a precios más que convenientes. Complementa el consumo diario de estas cápsulas con un rico jugo natural de naranja al comenzar tu día. Este delicioso brebaje no sólo te dotará de vitamina C - cuyos beneficios a nuestras salud son innumerables -, sino que además despertará tu mente, ayudándote a iniciar la jornada con mucho ánimo y energía.
2. Maravilloso propóleo: Las abejas son indispensables para la supervivencia de nuestra especie, ¡y vaya que hay razones para afirmarlo! No sólo participan de la polinización, favoreciendo la producción de frutas y verduras, sino que también nos obsequian maravillas naturales, como el fabuloso propóleo. Esta sustancia es usada por estos hábiles bichitos como una protección para sus panales, previniendo la proliferación de bacterias y parásitos. En nosotros, tiene los mismos efectos, por lo que su consumo diario nos mantendrá imbatibles en toda época del año, ¡no sólo en invierno!
3. Evita los cambios de temperatura: Los especialistas coinciden en que lo más nefasto para la salud no es el frío en sí, sino el violento paso desde ambientes templados a un exterior gélido. Es por eso que la principal recomendación para evitar enfermedades es la enunciada. Procura abrigarte lo suficiente cuando salgas desde tu casa y apaga las estufas al menos media hora antes. Sólo así, mantendrás una temperatura corporal uniforme que te mantendrá sana como manzana.
4. Lava constantemente tus manos: Si bien podemos ser muy cuidadosas con respecto a nuestra higiene, las personas que nos acompañan en el transporte público no necesariamente lo son. Es por eso que tú debes extremar las providencias, llevando siempre contigo una botella de alcohol gel y lavando tus manos con agua y jabón cada vez que llegues a algún lugar. Así, los virus que pululan en el ambiente no te atacarán.
5. Estudia a diario: Preparar una prueba importante justo el fin de semana anterior no es una buena estrategia. Por eso, hazte el hábito de repasar tus materias al menos una hora de lunes a domingo. Interiorizar cada día los contenidos aprendidos es la mejor fórmula para el éxito académico. Te permitirá estudiar con mayor relajo, lo que ayudará a que llegado el momento de una evaluación baste con un repaso para estar lista. Todas sabemos que asimilar la materia de un semestre es tan sólo un par de horas es misión imposible, así es que dosifica. Además de lo anterior, transcribir semanalmente tus apuntes te permitirá ordenarte, refrescar conocimientos y ¡ser imparable!
6. Deja un tiempo para ti: Dejarnos absorber por las obligaciones diarias es lo que más estrés nos genera, ya que sentimos no tener vida. Tomar un tiempo para aquello que te gusta es tan importante como cumplir con tus obligaciones; de lo contrario: ¿qué sentido tendría la vida?. Por algo somos personas, no máquinas; así es que no pretendas comportarte como una y libérate por algunas horas: sal con tu pololo, llama a tus amigas, enciende la consola o ve tu serie favorita. La mente que se limpia, se despeja y ¡rinde más! (recuerda que hasta los artefactos eléctricos requieren que los desconectemos de vez en cuando)
Y bien, ¿estás lista para vivir un invierno fantástico?
Imagen CC Nhoj Leunamme==Jhon Emmanuel