Entre amigas, acostumbramos compartir muchas cosas, tales como los pormenores de nuestras relaciones. Si él dijo esto o hizo lo otro, ¡ellas son las primeras que saben! Sin embargo, hay algo que todas nos reservamos y son los detalles íntimos menos amigables. Está claro que hay instancias que son sólo de pareja, las cuales no queremos compartir con nadie más, por mucha confianza que tengamos. Pero cuando hay problemas en la alcoba, quizás comentar la experiencia nos ayude más de lo que pensamos.
La doctora Odette Freundlich, kinesióloga del Centro Mi Intimidad, relata que a su consulta llegan muchas mujeres de diversas edades, con problemas tales como la falta de apetito sexual o el dolor que se experimenta durante las relaciones. Una de ellas relató en una de las sesiones que, al reunirse con amigas, todas parecían estar regio. Tenían sexo con sus parejas unas 3 veces por semana y alcanzaban orgasmos grandiosos. Ella sólo sonreía, sin animarse a contarles que su caso era diferente, pues estaba en tratamiento por vaginismo. Llegaba a casa sintiéndose muy frustrada.
Un día se animó y - por recomendación de la especialista - preguntó a sus partners si alguna sentía dolor en los encuentros amorosos. La respuesta fue asombrosa, ya que la dio pie a que cada una se sincerara. Lo cierto era que ninguna tenía una sexualidad tan satisfactoria: la mayoría sí experimentaba ardor e incluso una de ellas reconoció que jamás había tenido un orgasmo. El clima que se creó animó a la chica a contar su experiencia, recibiendo gran apoyo y compañerismo por parte del grupo.
Es por esto que la experta nos recomienda hablar con nuestras amigas de los temas que nos aprobleman. Así, nos daremos cuenta de que no somos “extrañas” y muchas tienen nuestras mismas inquietudes, sin animarse a manifestarlas. Reconocer una situación incómoda es el primer paso para solucionarla, al compartirla, comparar y animarnos a consultar de ser necesario.
Y tú, ¿confiarás tu problema sexual a tus amigas del alma? Hazlo; ¡te sorprenderás con el buen resultado!