Nunca entendí esa moda del pantalón a la cadera. Siempre encontré que acortaba la figura, se salía el rollito y veíamos más de lo que queríamos. Fui una de las personas más felices cuando a las tiendas chilenas volvieron a llegar los pantalones de tiro alto y me emocioné al ver que tiendas extranjeras ofertaban distintos tipos de blue jeans, pensando en que no todos los cuerpos son iguales.
Todo iba bien hasta que la revista Vogue confirmó lo que me ha tenido al borde de las lágrimas toda la semana… Vuelven los low cut jeans, o mejor dicho, pantalones a la cadera, con el tiro muy bajo. Durante los años que estuvieron de moda sufría cada vez que entraba a una tienda, no había nada, pero nada que me gustara. Fue tanto, que terminé mandándome a hacer varios.
Soy baja, muy baja y con caderas anchas, por lo que ese tipo de pantalón es lejos mi peor pesadilla. Me acorta aún más la figura y resalta donde no quiero que nadie mire. El gran drama es que en Chile, cuando algo se masifica en las tiendas, es casi imposible encontrar una cosa distinta. Por eso, creo que arrasaré las tiendas ahora que aún no llegan.
A ustedes, ¿les gusta que vuelva esta moda o están igual de atacadas que yo?