Él quiere sexo oral y a mí no me gusta. ¿Qué hago?

Complicado tema, amiga mía. Los desacuerdos de alcoba te pueden jugar en contra a la hora de mantener una relación de pareja sana y feliz. El sexo es un área importante que te ayuda a generar mayor intimidad y complicidad con tu hombre. Ambos se complacen mutuamente y esta potente conexión te permite explorar tu sexualidad libre y completamente.

Pero, por sobre todo, el sexo debe ser algo placentero para ambos. Nadie te puede obligar a hacer algo que tú no quieras. ¡Siempre recuerda eso!

Sin embargo, vamos a convenir que dentro de todas las alternativas que tienes para realizar en la alcoba, el sexo oral es algo que los hombres adoran (¡y nosotras las mujeres también!). No entraré a explicarte exactamente el porqué, pero las sensaciones se amplifican por mil con esta solicitada movida femenina. Ahora, sí a no te gusta realizar sexo oral, ¿qué puedes hacer?

Lo primero sería tener claras las razones del porqué no te gusta. Quizás tu chico es bastante peludo en su zona íntima, y te molesta/da asco estar cerca de la selva amazónica. En ese caso, ¡habla con él! Es tan simple como hacerse un rebaje con unas tijeras y/o una rasuradora. Será más placentero tanto para ti como para tu hombre, que sentirá mucho más.

También puede ser, que después de un largo día de actividades, tu chico no huela tan bien ahí abajo. Quizás, también, su sabor no sea el de un rico helado de chocolate. En ese caso, nuevamente, ¡habla con él! Dile que si quiere que le hagas sexo oral, debe asearse primero. Créeme, no le importará. Los hombres son capaces de hacer muchas cosas con tal de disfrutar tan placentero arte.

Ahora, si aún después de asearse no te gusta el sabor de su pene, puedes probar con dos ideas. Primero, pueden comprar condones de sabores y ver qué tal te va con eso. Quizás el látex con sabor a frutilla te resulta más pasable. Segundo, puedes probar untándole cosas comestibles. Cubre su miembro con salsa de caramelo, con nutella, ¡o échale un poco de crema! Será divertido tanto para ti como para él.

Finalmente, si ya has probado de todo y simplemente no aguantas ni 10 segundos, nuevamente háblalo con él. Lo importante es que seas clara y lleguen a un consenso. En todo caso, si el amor es verdadero, no creo que sea un deal breaker. Podrías masturbarlo con aceite de masaje de vez en cuando, como premio de consuelo. O también hacerle sexo oral una vez al año, para su cumpleaños.

Y tú, ¿qué opinas de este tema?