¡Depende! Querida, si te has enterado de que el pololo de tu gran amiga le es infiel, respira hondo y cuenta hasta 10 antes de hacer alguna locura. Este tipo de situaciones (relaciones de pareja e infidelidades) requieren pensar bien las cosas y tener gran tacto. Sé que somos impulsivas y una situación así nos hace hervir la sangre, pero tenemos que saber controlarnos.
Primero que todo, evalúa tu grado de amistad. Si la chica engañada es tu mejor amiga, se conocen hace años y confía en ti más que en ninguna otra persona, entonces se lo puedes decir sin más. Procura que estén a solas y que dispongas de tiempo suficiente para poder consolarla: la infidelidad es un golpe que nos llega duro. Sin embargo, tu amiga es una mujer fenomenal y merece un hombre que la valore y la respete.
Ahora, si la chica es una “buena amiga”, tienes que entrar a pensar un poco mejor las cosas. ¿Te creerá si se lo dices así, sin más? ¿Pensará que le mientes y que eres una envidiosa? Si el pololo niega que le haya sido infiel, ¿le creerá a él o a ti? En estos casos te conviene tener “otro testigo” o algún tipo de prueba que valide tus acusaciones. Lo sé, a veces pasamos a ser detectives. Pero si tu cariño por ella es genuino y no puedes soportar las mentiras, tendrás que reunir evidencias que te respalden.
Otro método, sobretodo en casos en que nuestra amiga está enamorada hasta las patas, es hablar directamente con el pololo infiel. Dile que sabes que está engañando a tu amiga y que no sólo debe parar, sino que también debe decirle. Si no lo hace él, lo haces tú. Es posible que si el chico en cuestión “se arrepiente”, le cuenta y le pide perdón, tu amiga lo perdone. Procura, entonces, que la relación entre ustedes quede en términos cordiales: no es la idea perder a tu amiga por intentar hacer un bien.
Finalmente, quizás lo mejor que podemos hacer, es hacer nada. A veces las cosas caen por su propio peso, y es preferible callar lo que se sabe. Personalmente no me gusta esta opción, ya que soy protectora con mis amigas y detesto saber que les están viendo la cara. Pero asumámoslo: el amor es ciego y la locura siempre lo acompaña. Hay personas que están dispuestas a pasar por alto las infidelidades. Y cuando osamos a interponernos, podemos salir trasquiladas.
Medita bien tu decisión. Lo más importante es que tu amiga sea feliz. ¡Mucha suerte!