Vivimos en el siglo de la tecnología y cada vez la comunicación entre personas es más fácil, expedita e inmediata. Esto ha facilitado mucho la infidelidad, tanto así que páginas como Ashley Madison han tomado gran relevancia y adeptos, pero ¿qué pasa cuando hay una infidelidad virtual? ¿Es válida? ¿Qué se hace cuando descubres que tu pareja tiene un cyber affaire? La verdad, creo que nadie tiene la razón respecto a este tema, ni puede decir qué hacer ante estas situaciones, ya que son decisiones personales que sólo tú debes tomar, considerando muchos factores y qué quieres para el futuro. Pero quizás podamos darte algunos puntos para pensar.
Seamos claros, perdonar una infidelidad (que se haya concretado) siempre es difícil. Muchas personas deciden que no pueden perdonarlas, pero hay otras que son capaces de seguir su relación y ser felices después de superarlas. Ahora, una infidelidad virtual ¿tiene el mismo peso que una en vivo y en directo? Personalmente creo que no, pero sí existe una merma en la autoestima del "engañado", porque finalmente significa lo mismo: que algo está fallando o faltando. Pero démosle otra vuelta: quizás no eres tú la persona que tenga problemas de valía, sino que tu pareja sólo quiere coquetear para sentirse atractivo y deseado por alguien más. No por esto hay que justificarlo, pero es algo a tener en cuenta al momento de tomar la decisión de seguir o no.
Por otra parte, ¿todo quedaría en el cyber mundo o se llevaría a cabo en el mundo real? ¿Hasta donde quería llegar tu pareja con esto? Ese es un tema importante, porque si quería conocerla o concretar algún encuentro ya no se trata de una "cyber infidelidad", sino que de un engaño real y tangible.
Tambien es bueno considerar si existe algún vínculo afectivo más allá del cyber espacio, y eso también se va a relacionar con el tiempo que esté siendo infiel y si es la única o hay más cyber relaciones paralelas.
Finalmente la decisión de validar o no una infidelidad virtual es sólo tuya: lo importante es que te abras al dialogo, te des el tiempo de conversar y preguntar las cosas que necesites saber antes de tomar una decisión.
Y a ti, ¿te ha pasado?