¿Alguna vez oíste hablar de los ejercicios Kegel? Son aquellos que ayudan a fortalecer la musculatura pélvica, que incluye el cuello uterino, la vejiga e intestino grueso. Hacerlos 3 veces al día reporta considerables beneficios para nosotras, como la prevención de pérdidas urinarias o fecales que se producen con el paso del tiempo.
Además de los beneficios referidos, la práctica constante de ejercicios Kegel también contribuye a mejorar el tono muscular de la vagina, especialmente luego de haber atravesado un parto. Con ellos, la vida sexual también mejora de manera ostensible. Pero ojo, no debes ser mamá para disfrutar de sus bondades, ya que si aún no tienes hijos, ejercitar tu zona pélvica te ayudará a tener partos más amigables y con menor tendencia a desgarros.
Lo mejor de estos ejercicios es que puedes practicarlos en cualquier momento y lugar; ya sea en una aburrida reunión, mientras ves tu serie favorita, cuando esperas que te atienda un doctor y mientras viajas de vuelta a tu hogar. No necesitas equipamiento deportivo, sólo saber cómo hacerlos y ser constante. Si no tienes la más mínima idea de en qué consisten, ¡no te preocupes!, ya que en Fucsia te explicamos:
1. El primer paso es identificar cuáles son los músculos que debemos ejercitar, mediante series de contracción y retracción. Como dato, se trata de aquellos músculos que usas cuando vas a orinar o contienes tus deseos de hacerlo. Si con esta señal aún te cuesta reconocerlos, pide a tu médico de confianza que te ayude a lograrlo.
2. Siéntate o recuéstate, relajando los músculos del abdomen, muslos y nalgas. Si eres primeriza en estas lides, prefiere la posición recostada.
3. Contrae el anillo de músculos alrededor del ano y luego relájalo. Procura no apretar los glúteos mientras realizas estas series. Tampoco aguantes la respiración.
4. Haz lo mismo con los músculos que te ayudan a contener la orina. Repite todo, sin exagerar y si es tu primera vez, procura estar relajada y concentrarte. Repite 10 a 15 veces cada serie de contracciones y retracciones, contando hasta 3 por cada una.
Y bien, ahora que ya sabes cómo hacer tus ejercicios, ¿cuándo te pondrás manos a la obra?