¿Alguna vez has soñado con despertar y vivir en otra época? Pues bien, a mí me suele pasar. Suelo ver imágenes en Internet de diferentes tiempos, muy diferentes a los actuales. Y aunque me gustan muchas épocas, definitivamente me quedo con los albores del siglo XX. ¿Te cuento por qué? Lee la siguiente nota e imagina conmigo cómo habría sido vivir en ese tiempo.
1. Moda y exuberancia femenina: La mujer siempre ha sido víctima de críticas. Sobre todo, si hablamos de moda. La restricción ha causado que muchas mujeres busquen vestirse de manera incómoda, para taparse u ocultarse. A principios del siglo XX, la mujer empieza a destaparse. Se preocupa por su silueta y cómo resaltarla de buena manera.. El corset hace su aparición en gloria y majestad, para afinar la cintura y hacerla más pronunciada. Eso sin contar los hermosos vestidos, llenos de volumen. En resumen, imposible pasar inadvertida.
2. Uso de accesorios: Guantes, collares de perla, sombreros gigantes, aros llamativos y sombrillas, son la tónica de esta época. Nada más femenino que ver a las mujeres caminar con tremendos y elegantes vestidos, adornados con una sombrilla fina para cubrirse del sol o las inclemencias del tiempo. Sacarle provecho a la femineidad es una condición que se ha ido generando desde principios del siglo XX, cuando mientras más llamativas lucíamos, ¡mejor!
3. Medios de transporte: Siempre he soñado con trasladarme en un ferrocarril o en los excéntricos autos de la época. La primera opción era toda una odisea. Al ser más lento y recorrer grandes distancias, el viaje parecía un paseo. Las familias solían despedir a los suyos en masa cuando abordaban un tren. La escena era muy de película y ¡hasta romántica!. Para qué vamos a hablar de los autos, con grandes carrocerías. Brillantes y llamativos, o sea, hechos para lucirse por las calles.
4. Arte y cultura: Los adelantos tecnológicos de esta época, hicieron que muchos expertos nombraran a este periodo como “revolución científica” y “vanguardia artística”. La arquitectura y la pintura se volvieron pasatiempos recurrentes en la población. Me hubiese encantado ver esa evolución cultural y vivir recorriendo exposiciones. En ese tiempo no era mal visto vivir de la pintura; es más, era un privilegio de pocos. Además, los pintores solían retratar el cuerpo desnudo de las mujeres, sin tapujos. Eran amantes del cuerpo femenino. Lamentablemente, hoy en día eso es más cuestionado.
5. Deportes en Chile: El boxeo, tenis y fútbol (primer mundial en Uruguay en el 1930), se viven con mucha intensidad. Estas prácticas son recurrentes y comienzan a aparecer con mucha fuerza. La gente se interesa por ellas y empieza a tomar conciencia de la importancia de realizar actividad física. De alguna manera, el deporte empieza a ser visto como un espectáculo más, similar a un concierto u obra de teatro.
Ahora ya sabes por qué me enamoré de principios del siglo XX. Soñar con esas épocas e imaginarse viviendo en ellas, es súper interesante.
Y tú, ¿qué época prefieres??