Desde que era niña, me gustaban los hombres mayores. Al principio, sólo se debía a que los niños hacían "cochinadas", peleaban por todo y creían que las niñas éramos derechamente, "tontas". Pensaba que cuando creciera esto iba a cambiar, pero nada más lejos de la realidad. Con el paso del tiempo, no sólo me seguían gustando los hombres mayores, sino que ellos también se interesaron en mí.
Mis intentos por andar con hombres de mi edad fracasaron y siempre terminaba interesada en alguien mayor: el hermano de una amiga, el niño de un curso superior, el ayudante de un ramo en la universidad, un profesor. En fin, la "tendencia" siempre se ha mantenido.
Llegué a un punto que me pregunté por qué. ¿Qué tenían los hombres mayores que siempre terminaba hechizada por uno de ellos? y ¿sabes?, llegué a una conclusión:
1. Los hombres mayores no sufren de crisis existencial si no van a bailar un fin de semana y terminan "carreteados" sacándose una "selfie" con su grupo de amigos.
2. Cuando sales con un hombre mayor, siempre encuentra que te ves bien. No le preocupa si está de moda y es menos exigente con tu físico, ya que él tampoco es perfecto en ese ámbito y ya entendió que lo único seguro con el cuerpo, es que envejece y se deteriora sin importar los esfuerzos que pongas.
3.- Ese aire de experiencia que resulta tan atractivo, también es llevado a la conversación; un hombre mayor generalmente es más culto y estará interesado por una gran variedad de temas. Además estará dispuesto a enseñarte cosas con mucha más calma y paciencia, sin burlarse si no te funciona la tecnología. Es más, incluso se enternece cuando te tiene que explicar las cosas y - tomando en cuenta mi habilidad con los avances de la ciencia -, eso resulta gratificante, porque no te frustras. Te alegras cuando logras "domar" esa herramienta de Internet que te tenía loca.
4.- A los hombres mayores, no les importa el "qué dirán". Lo único que les interesa es que ustedes estén bien. Si le gustas a sus amigos o no, no tiene ninguna relevancia. Como son seguros de sí mismos, no andan en busca de la aprobación del grupo. Como por lo general sus amigos también tienen parejas estables, las reuniones son relajadas, sin competir por "quién tiene la mejor mina" o miedo de que la polola del amigo se quede con tu pareja. Entre ellos la amistad tiene años de historia y nadie la arriesgaría por algo como eso.
5.- Las relaciones con hombres mayores, son más intensas. No defienden tanto su propio espacio, ya que están dispuestos a compartirlo contigo. La rebeldía y el miedo a que "todo el mundo lo quiere controlar" o "limitar", porque "no lo entienden", ya desaparecieron. Ellos saben que una llamada para saber "¿cómo está?" es sólo eso y una demostración de que lo echas de menos. No piensa que es algún medio de control ni que la pregunta va enfocada a averiguar qué está haciendo, con quién está, ni por qué no está contigo. La verdad, es que un hombre mayor, como ya tiene experiencia con las mujeres, sabe leer mejor nuestros mensajes y necesidades.
Luego de pensar en todo esto, encuentro que no es "loco", sino "lógico" que los prefiera; ya que en vez de andar preocupada del físico, la ropa, estar siempre dispuesta al "carrete" ( y por supuesto aguantar su "curadera", tratar de agradarle a sus amigos, andar sobre algodones para que no sienta que invades su espacio y saber que su vida social está por sobre cualquier otra cosa, prefiero vivir tranquila e intensamente una relación donde los dos importemos. No nos defenderemos el uno del otro, sino que compartiremos nuestros espacios y momentos. El foco estará puesto en disfrutar la vida, sin importar lo que los demás digan de eso.