En los años setenta acontecen varios hechos que marcan la época. Mueren grandes estrellas como Elvis, Janis Joplin, Jimmi Hendrix y los Beatles se separan. Por suerte, había una gran gama de hombres estupendos que ayudaron a las mujeres de la época - a través de su música o películas - a pasar las penas mientras entretenían la vista.
Syd Barrett:
El líder de la banda inglesa Pink Floyd tenía ese aspecto de chico malo que a muchas mujeres les encanta. Además de ser cantante y guitarrista, compuso el primer álbum de la banda, la cual abandonó más tarde debido a sus problemas con las drogas y el alcohol. Además de mino, es hasta el día de hoy uno de los artistas más importantes del rock psicodélico y progresivo, siendo una gran influencia para bandas que aparecieron más adelante. Ese pelo desordenado y esa mirada perdida, definitivamente lo convierten en un mino rico alternativo.
Sting:
El líder de The Police, incluso hoy sigue siendo un minazo. Parece que los años a él sólo lo mejoran. Un mino así, era imposible que no brillara con luz propia, por lo que hoy es un solista que se ha ganado su lugar más allá de la pinta de modelo Calvin Klein que tiene desde joven. Eso, sumado a su pelo dorado - con pinta de ser lavado cuidadosamente con shampoo de manzanilla - me hacen pensar en un mino preocupado de sí mismo, que se sabe rico, pero no por eso se deja estar.
John Travolta:
Terminando la década, este joven de profundos ojos azules hipnotizó a cuanta mujer se le cruzó por delante con su destreza para el baile y las notas agudas a las que llegaba cantando. En esa época, John era MINO. Con Grease Brillantina y Fiebre de Sábado por la noche se convirtió en la cita soñada que nuestras mamás hubieran querido para salir a bailar un fin de semana. Eso sí, el tiempo pasa y claramente John ya no está como antes. Pero nos quedamos con sus sensuales ojos azules y esa sonrisa tan blanca y soñada que te hacía recordar que no, no estaba a tu alcance.
Sid Vicious:
Otro chico malo que lo llevó realmente al extremo. El vocalista y bajista de los Sex Pistols, gracias a su lema de “vive rápido y muere joven”, sumado a su personalidad bordeline y varios problemas con las drogas, murió cuando apenas tenía 21 años. De todas formas, tenía una personalidad atractiva y un look que llamó la atención de varias, aunque como sabemos, él tuvo una sola obsesión: Nancy, su amor y perdición.
Al Pacino:
Este tremendo actor tenía lo suyo cuando joven. De cara delgada, ojos grandes, aires de misterio y actuaciones en películas donde protagonizaba papeles que lo hacían ver aún más interesante. En los años setenta fue cuando interpretó a Michael Corleone en la primera y segunda entrega de El Padrino, una de las películas más icónicas de la historia del cine. Lo más mino que le encuentro, es que dentro de todo, de joven era un tipo físicamente bastante normal. Uno que podía ser tu compañero de la U, el amigo de tu hermano o el paracaidista interesante de un carrete. Yo igual le invitaba un copete.
En este caso, ¿te quedas con el cine o con la música?