¡Un hombre hermoso por dentro y por fuera! ¡Realmente encantador! Así era una pareja que tuve. Iniciamos nuestro romance juvenil, lindo, tierno, así como el primer amor. De esos que te provocan mariposas en el estómago, pero lamentablemente, más cariño que deseo.
Pasando un tiempo me sentía muy bien a su lado, me cuidaba, me entendía; sentía que me podía tener absoluta seguridad con él. Sin embargo, llegó el momento en que me di cuenta de algo terrible: Que lo adoraba con todo mi corazón, pero no me movía el piso de la forma en que una mujer espera. Y siendo así, una relación se torna difícil, ya que la pasión es un aspecto muy importante para consolidar a una pareja. Creo que es genial sentirse amado y saber que esa persona está en todas contigo, pero no podemos pasar por alto la sexualidad.
"¿Qué hacer?", me pregunté muchas veces y mi cabeza daba vueltas, convirtiéndose en un torbellino de locura, jaja. Hasta que pensando y pensando llegué a una solución:
Era imposible dejar a un hombre tan lindo de lado, teniendo una relación de verdad y que en su momento me llenaba el alma. Solo me armé de valor y conversé con él de este tema, haciéndolo sentir lo más cómodo posible, sin pasar a llevar su ego.
Intentamos hacer otras cosas en el plano íntimo, para ver si resultaba mejor o provocaba esa pasión que en mí estaba apagada. Hicimos varios intentos, pero nada resultó.
Luego de esto, decidí que lo mejor era darnos un tiempo, para ver qué era lo que estaba fallando. Me sentía pésimo, pero no podía tolerar estar con él, que me buscara y yo no responder como debía.
Fue súper complicado, ya que lo adoraba con todo el corazón, pero en realidad es lo mejor que se puede hacer. Si estás con un hombre al cual amas, pero algo anda mal en la cama, intenta conversar las cosas, no escapar del tema.
Haz todo lo posible primero, antes de darte por vencida: atrévete a decirle que te haga un baile erótico- no sólo las mujeres hacemos eso- , tener relaciones en lugares prohibidos (para activar la adrenalina) o prueba con juguetes y juegos de preguntas y penitencias.
Si más allá de eso no se puede hacer nada, tomarse un tiempo no es mala opción. Por ejemplo, cada uno puede estar con otras personas y encontrar lo que faltaba en la relación anterior. Quizás pueda volverse a encender la chispa de la pasión; tal vez no, pero lo importante es que esa persona (independiente de si vuelves o no con ella), siempre será importante y clave en tu vida. Si hubo amor real, eso perdurará a través del tiempo, aunque quede sólo en una linda amistad.
A ti, ¿te ha pasado algo similar?