Las relaciones de pareja no suelen ser sencillas; probablemente todas tenemos amores que nos han hecho sufrir. Pero estoy convencida de que hay personas a las que les encanta sufrir por amor. No están tranquilos en una relación estable, necesitan terminar y volver constantemente con sus parejas, tal como veríamos en cualquier teleserie venezolana.
Estoy segura de que más de una ha tenido una amiga cuyas relaciones duran años, pero nunca están juntos más de un mes de corrido. Es esa partner que cuando la ves, ya no sabes si preguntar por el pololo o por el ex; sólo esperas a que ella te comente si es que pelearon o volvieron recientemente. Lo triste es que suelen comentar o publicaren redes sociales que las peleas de pareja hacen que el amor sea más fuerte, mirando en menos a quienes no pelean ni terminan, diciendo que no se aman realmente.
Hasta ahí, el problema es de ellos y no te influye. Pero cuando tu amiga empieza a hablar mal de su pololo (o ex, dependiendo del día), te complica un poco más la existencia. Esto, porque por muy malos comentario que ella haga, sabes que después volverá con él. Entonces, si te dice que es tacaño, está mal dotado o sus olores son desagradables; que es mentiroso y parece que era infiel, ya no sabrás cómo mirarlo cuando esté con tu amiga otra vez. Es más, lo más probable es que te caiga mal y lo único que querrás será que terminen definitivamente.
Con el tiempo, he tenido que aprender a ser espectadora frente a algunas amigas que disfrutan del ir y venir en las relaciones. No hay consejo que funcione y no hay forma de que entiendan que las relaciones no tienen que incluir el sufrir por el otro, el llorar constantemente por amor, el odiar momentáneamente y luego volver a amar. Mientras ella no se dé cuenta de que tiene que dar un paso al costado, no podemos hacer más que consolarla cuando lo necesite.