En ocasiones, sentimos ciertos bloqueos energéticos por causas indeterminadas. Buscamos ayuda en aquella oreja “amiga” o leemos en Internet de qué enfermedad son síntoma nuestras afecciones, pero no. Es muy probable que estemos buscando con las palabras equivocadas y que dicha condición se deba a un mal funcionamiento de los chakras. ¡Tal como lo lees!
Pero bueno, ¿qué solución le damos? ¡Pues activarlos! Lee con atención las siguientes líneas, que aquí te contamos cómo hacerlo:
1. Muladhara (Raíz): Su mal funcionamiento acarrea un sentimiento de desarraigo, timidez e introversión, temor de enfrentar la rutina, dispersión, desconfianza, falta de asertividad (es decir, te cuesta declinar invitaciones o propuestas y terminas aceptándolas por obligación), sentimiento de culpa y obsesión por atesorar bienes materiales. ¿De qué manera activarlo? ¡De las más entretenidas! Apúntate en un taller de danza, trota, salta en tu sitio, regresa a casa caminando y practica aeróbica. Asimismo, ¡no dejes de mimar tu niño interior!
2. Svadhisthana (Sexual): Cuando no trabaja de manera óptima, trae consigo miedo al disfrute, aversión al sexo, comportamiento auto-represivo y aberraciones sexuales. ¿De qué manera potenciarlo? Pues nada mejor que la danza árabe, cura suprema de todos los males. Pero si no te tinca, puedes entregarte al dulce placer de nadar, bailar salsa o merengue, tomar un baño en jacuzzi y ¡tener sexo sin parar!.
3. Manipura (Plexo solar): Un bloqueo en este chakra tendrá como consecuencia la fatiga crónica, aumento de peso (concentrándose éste en el abdomen), adicción a psicofármacos o estimulantes, inseguridad, molestias digestivas, insatisfacción, culpa y egoísmo. ¿Cómo hacer para activarlo? Pues cambiando nuestros hábitos, luchando contra la rutina o apuntándonos en clases donde podamos liberar la ira, como el aerobox. También es muy recomendable practicar jogging o hacer sentadillas.
4. Anahata (Corazón): Su mal funcionamiento puede llevarnos a una desconexión emocional, aislamiento, egoísmo y - como broche de oro - enfermedades cardiorrespiratorias. Para desbloquearlo, perdona a quien te ha dañado y deja ir los rencores. Además, practica ejercicios de respiración o arquea tu espalda, visualizando en tu mente cómo tu pecho se abre. ¿Viste “Cadena de Favores”? ¡Es otra cosa que debes anotar en tu agenda!: tratar de hacer el bien a alguien todos los días.
5. Vishuddha (Garganta): Si se bloquea este chakra, probablemente tal condición se manifestará en afecciones bucofaríngeas, problemas de voz y dificultades para comunicarte. Puede ser que te cueste sobremanera hablar en público o bien, la verborrea se apodere de ti y parlotees sin parar ni pensar. Para liberar las energías atoradas en él, pronuncia en forma sistemática y reiterada el mantra “om”. Haz también ejercicios de cuello (como giros circulares o suaves y en distintas direcciones) o grita. Además, te haría bien anotarte en un taller de canto.
6. Ajna (Tercer ojo): Su colapso puede generar alucinaciones, desórdenes mentales o problemas a la vista. La forma de activarlo es muy placentera: basta con que cierres tus ojos y masajees suavemente los párpados de manera circular. Extiende los movimientos hacia las sienes, cejas y contorno general. Mientras lo haces, procura visualizar figuras geométricas simples. Si puedes, súmate a una meditación guiada.
7. Sahasrara (Corona): Si este chakra experimenta un bloqueo, puedes llevarte a una actitud dominante y prepotente de “sabelotodo”. También acarrea dificultades de concentración, estrechez mental y materialismo extremo. Puedes activarlo meditando, tendida sobre tu cama y visualizando con tu mente una hoja del blanco más profundo por alrededor de 20 minutos. Además, la oración - independiente de cuál sea tu credo - será esencial para la sanación del Sahasrara.
Además de lo expuesto, ten presente que disciplinas como el reiki o el yoga siempre te serán de utilidad.
Y bien, ¿qué chakra necesitas activar?