Muchos hemos soñado con la cita ideal y, en realidad, no sé si lo hemos logrado. Cada experiencia particular puede decirnos si nos hemos acercado o no a “ese momento mágico” que siempre se recuerda. Pero si nos ponemos a analizar más seriamente la situación, la primera pregunta que cabe hacerse es ¿ideal para quién? ¿Para ella, para mí o ambos? Obviamente, la respuesta debiese ser para ambos, pero por lo general es el hombre quien cede a los gustos de la mujer, en haras del romanticismo y de “darle un gustito” a su amada.
Tratar de comentarles a ustedes cuál es mi cita ideal no viene al caso, ya que - además de autorreferencia innecesaria -, muchas de ustedes podrán diferir. Reconozco que a veces la rutina y los problemas cotidianos han hecho desaparecer muchos rasgos de romántico, pero trato de suplirlo con una preocupación constante por mi amada y estar siempre presente, y a su disposición para lo que necesite.
Pero, volviendo a nuestro tema, sí siento que podría ayudarlas con unos tips. Siempre pensando en que una relación es de a dos, a pesar de las muuuuchas diferencias que existen entre hombres y mujeres, en gustos, sensibilidad y un largo etcétera, creo necesario recomendarles ir a lugares especiales para ambos. Siempre es bueno partir por esas locaciones donde, por ejemplo, se dieron el primer beso o donde les pidieron pololeo. Caminar de la mano, conversar, abrazarse, besarse, pensar sólo en los dos y dejar de lado preocupaciones, estudio, trabajo, familia, siempre ayuda a desconectarse del mundo y vivir un momento de a dos.
Aquí comenzamos con los depende. A algunos les gusta ir a comer, otros a un pub o una discotheque. En lo que a mí respecta, prefiero las dos primeras opciones. Una disco es un lugar entretenido, bailas, lo pasas genial, pero… andar conversando a los gritos, bailar en un metro cuadrado por una repleta pista de baile y exponerse a que en cualquier momento, el jugoso de turno te voltee un trago encima, creo que es poco romántico y no ayuda a generar “ese ambiente” que tanto buscamos. ¿O será que me estoy poniendo viejo y fome?
Mis primeros carretes fueron en los 90's, donde aún se bailaban lentos, y en la desaparecida disco “Gente”, se hacían fiestas sin alcohol, sobre todo para sub 18 como yo en ese entonces. Casi al final de la noche, era “el momento”, acordes de canciones como When I see your smile o Since I don´t have you, preparaban el ambiente romántico y te invitan a estar cerca de ella (o él, según sea el caso). Esa magia, se logra en un pub o en un restaurant, ya no se logra en una disco, al ritmo del reggaetón, raga, o incluso la bachata, ritmos demasiado rápidos para bailar apretado, tomarse de las manos y la cintura, sentir la respiración, los latidos del corazón de tu pareja y estrecharla sobre tu pecho. (Ok, se me cayó el carnet, jaja)
Para culminar la noche, todo queda a la imaginación. No soy de after, si de lugares más tranquilos, para finalizar la velada de la mejor manera y estar lo más juntos posible. Es mi sugerencia, ojalá les guste. Al menos pruébenlo y me cuentan cómo les va.